Al euro le aprietan sus zapatos italianos

Mercedes Mora LA VOZ

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Tony Gentile | reuters

La entrada en recesión de la tercera economía del club de la moneda única activa las alertas europeas

08 feb 2019 . Actualizado a las 13:31 h.

El euro cumple 20 años. Pero el ambiente en el club de la moneda única no está para festejos. Lejos de las fanfarrias, el aniversario se está viendo empañado por las tensiones políticas que se viven en el seno de algunos de sus socios más destacados. Y ahora también, y por culpa en buena medida a lo anterior, por una recuperación, la económica, a la que el plomo se le está empezando a acumular en las alas.

En uno y otro terreno, las cosas pasan por Italia. Empeñada, como está la tercera economía de la eurozona en reafirmarse en su papel de enfermo de Europa. Sambenito ese que en otros tiempos llevaron con resignación Grecia o Portugal. Y en lo peor de la crisis, allá por agosto del 2012, con las iras de los mercados desatadas hasta España tuvo que cargar con esa pesada losa.

Italia

Tercera recesión desde que estalló la crisis. Los italianos están en recesión. Terreno pantanoso donde los haya y cuya cancela traspasa oficialmente un país cuando su PIB cae dos trimestres seguidos. En el caso de Italia: una décima en el tercer trimestre del año pasado y dos en el cuarto. Es la tercera vez que le ocurre desde que estalló la crisis. 

No ha tardado el Gobierno de Giuseppe Conte en echar balones fuera. Los de la coalición antisistema, formada por el Movimiento Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga, aseguran que la culpa la tienen los que estaban antes en el poder. Dicen que sus primeros Presupuestos apenas si han echado a rodar y que eso de la recesión no es cosa de ellos. Pero se olvidan de contar el impacto que ha tenido en el pulso económico del país ese combate que durante semanas mantuvieron los con Bruselas a cuenta de unas cuentas -valga la redundancia- demasiado alegres en el capítulo del gasto. Porque efectos, haberlos haylos. Ese tipo de peleas siempre hacen mella en la confianza de los inversores. Y esa muesca se traduce, siempre, inexorablemente, en mayores costes de financiación. Y este caso no es la excepción. Pero la economía italiana no es la única que renquea. Sí la que más, pero no la única. 

 Alemania

La locomotora europea pierde fuelle. La todopoderosa Alemania no es inmune a los vientos de ralentización que recorren el Viejo Continente. La potente locomotora europea acaba de poner sobre la mesa un tijeretazo de ocho décimas en su previsión de crecimiento para este año. Nada más y nada menos. Desde el 1,8 hasta el 1 %. La oficina de estadística germana todavía no ha desvelado los datos del último cuarto del 2018, pero los analistas lo tienen claro: los problemas por los que atraviesa su potente industria automovilística y las dificultades de navegación en el Rin (por donde transitan buena parte de las mercancías que exporta) por la falta de agua no le van a salir gratis. 

 ESPAÑA

Mejor que la media. Y mientras, España sigue creciendo a un ritmo muy superior a la media de la eurozona: del 2,5 %, frente al 1,8 % del club de la moneda única. Pero con síntomas de ralentización, como todos. Porque ese 2,5 % supone medio punto menos: más de 50.000 millones. De hecho, es el crecimiento menos lustroso desde el 2014.

 GRECIA

Del repudio al perdón. Camino inverso al de Italia ha seguido Grecia, epicentro de la crisis que tuvo a Europa en vilo no hace tanto y que a punto estuvo de dinamitar el euro. Tanto es así que hasta le han pedido perdón en Bruselas. «No fuimos solidarios con Grecia, la insultamos, la injuriamos», dijo para sorpresa de todos el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, hace apenas dos semanas. Tarde llega ese perdón, pero bienvenido sea. 

Después de sufrir un infierno, los helenos llevan dos años creciendo. A un ritmo anual del 2,2 % en el tercer trimestre del 2018 (último dato disponible). Y han vuelto a los mercados para financiarse. Con éxito.

 portugal 

De la desconfianza al elogio. Pero si hay un país de los demonizados durante la crisis al que ahora le llueven los elogios es Portugal. Su PIB avanza a ritmos superiores al 2 % y está recortando su abultada deuda.