Una mujer que atacó con un palo de golf en nombre del Estado Islámico, condenada a 7años de cárcel

La Voz REDACCIÓN / AGENCIAS

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El fiscal del caso, Jason Wakely
El fiscal del caso, Jason Wakely Twitter

La jueza ha tenido en cuenta la esquizofrenia que sufre la procesada

15 feb 2019 . Actualizado a las 16:17 h.

Una mujer que atacó a un grupo de trabajadores de un establecimiento comercial en Canadá con un palo de golf y un cuchillo, y envuelta en una bandera del grupo radical Estado Islámico (EI), fue condenada este jueves a siete años de prisión por terrorismo.

Según medios de comunicación locales, la jueza del caso, Maureen Forestell, señaló que la esquizofrenia que sufría la condenada, Rehab Dughmosh, de 34 años, jugó un papel central en sus acciones.

En junio del 2017, la mujer entró en un establecimiento comercial de Toronto y atacó con un palo de golf a un empleado. Cuando el palo le fue arrebatado, Dughmosh sacó un cuchillo y amenazó a otro empleado. Tras un rápido forcejeo, la atacante fue desarmada. Un empleado sufrió golpes en el incidente.

Durante la agresión, Dughmosh, que en el 2009 emigró con su esposo a Canadá procedente de Siria, se identificó como miembro del «Dáesh» (acrónimo en árabe de Estado Islámico) y que su intención era «vengar a los musulmanes».

Posteriormente, la detenida declaró a la Policía que había comprado un arco y flechas, así como otras armas, aunque su esposo las descubrió y le impidió que tuviese acceso a ellas.

Según la juez, la esquizofrenia de Dughmosh la dejó «vulnerable» a la manipulación por parte de extremistas por lo que la sentencia «es significativamente inferior a la que sería impuesta a un infractor que no sufriese una grave enfermedad mental».

La Policía señaló que en el 2013 Dughmosh empezó a interesarse por ideas extremistas, dejó de acudir a su mezquita y empezó a vestir con niqab, un velo que solo deja los ojos al descubierto. Dos años después, la familia de Dughmosh empezó a notar comportamiento paranoico y fue diagnosticada con esquizofrenia.

Dughmosh también reconoció que un año antes del ataque, en abril del 2016, viajó a Turquía para intentar entrar en Siria y unirse a EI, pero no lo consiguió porque su hermano advirtió a las autoridades, y la Policía turca impidió su entrada en el país árabe por lo que fue deportada a Canadá.