Desequilibros psíquicos y drogas, el dramático cóctel del doble parricidio de Godella
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Los padres de los niños asesinados en Valencia está previsto que declaren por separado ante el juez
10 jun 2021 . Actualizado a las 15:04 h.María Gombau y su novio Gabriel Carvajal eran distintos a la mayoría, pero querían a sus hijos. Amigos de la pareja han revelado en varios medios su extrañeza por lo sucedido. ¿Qué ha pasado entonces para que la madre de Amiel, de tres años y medio, y Rachel, que solo iba a cumplir seis meses, los matase con aparente ensañamiento? Todo apunta a un profundo desequilibrio psíquico, potenciado con el consumo de sustancias alucinógenas, un dramático cóctel al que hacía referencia la presidenta de la sección de Psicología de Emergencias del Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña, Anna Romeu, en un artículo en La Voz.
El juez que instruye el caso tomó declaración este sábado al padre de los niños. También se desplazó al hospital de Llíria, donde la madre permanece desde este viernes. María Gombau fue trasladada a este centro para ser sometida a pruebas sobre su estado mental. La joven recibía desde el 2017 tratamiento psiquiátrico en el centro de salud de Godella, la localidad valenciana donde se produjo el crimen.
Gombau procede de una acomodada familia de arquitectos de Rocafort. Nunca tuvo problemas económicos, pero desde joven dejó bien claro que su camino iba por otros derroteros. En sus perfiles sociales se puede comprobar que es una persona concienciada con el medio ambiente y la protección de la naturaleza y los animales, con muchas publicaciones de este tipo, tanto fotos como viñetas y dibujos.
Feminista y activista con el movimiento 15M participó en numerosas protestas y concentraciones tanto en España como en el extranjero. Incluso ella misma publicó una foto suya tras haber sido esposada por la policía.
El miércoles, cuando supuestamente cometió el doble crimen, estaba escondida en el interior de un bidón azul. Recogida en posición fetal, con las rodillas pegadas al pecho. Completamente desnuda y como ida. «Pero no sé dónde están mis hijos, quiero ir con mis hijos», dijo a la policía que la convencía para que se arrastrara fuera del depósito, según revela El Confidencial. Finalmente, la madre se derrumbó e indicó que sus hijos estaban muertos y enterrados. Los cuerpos mostraban signos evidentes de que habían sido golpeados.
¿Cómo llegó Gombau a ese punto? El País cita a sus amigas para explicar que la filosofía alternativa de la joven derivó en una «paranoia de control» cada vez más intensa mezclada con teorías místicas sobre la existencia de vidas anteriores. La pareja hablaba de un mundo dominado por una secta de pederastas. Un comportamiento que se hizo más evidente para su entorno en el último mes y que derivó en el trágico suceso de Godella.
