Mozambique teme más de mil muertos por un ciclón

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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Vista aérea de una de las zonas afectadas por las inundaciones, donde un grupo de personas permanecen sobre un tejado
Vista aérea de una de las zonas afectadas por las inundaciones, donde un grupo de personas permanecen sobre un tejado RICK EMENAKET | AFP

El presidente del país y Cruz Roja hablan de desastre humanitario de «grandes proporciones»

19 mar 2019 . Actualizado a las 07:59 h.

El presidente de Mozambique, Filipe Nyusi, estimó ayer que las víctimas mortales causadas por el ciclón Idai, que afectó también a los vecinos Zimbabue y Malaui, podría superar el millar después de que la tormenta barriera las provincias centrales. «De momento registramos oficialmente 84 muertos, pero cuando sobrevolamos la zona (...) [ayer] para entender qué ocurre, todo indica que podríamos registrar más de 1.000 muertes», dijo en un mensaje a la población.

«Es un auténtico desastre humanitario», sentenció Nyusi, quien estimó además que «más de 100.000 personas están en peligro» y aseguró haber visto cuerpos flotando en el agua.

Los vientos de extrema violencia del ciclón y las lluvias torrenciales azotaron el centro de Mozambique el jueves por la noche, y se desplazaron luego a Zimbabue, donde el número de víctimas mortales oficiales asciende a 89, la mayoría en la región de Eastern Highlands (este). En Malaui se registraron 56 fallecidos.

La zona cero del ciclón en Mozambique se localiza en Beira, una ciudad portuaria de medio millón de habitantes en la que el 90 % fue dañado o destruido, tras registrarse vientos de hasta 177 kilómetros por hora. Los daños son «enormes y aterradores», advirtió la Federación internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), que participa en las primeras operaciones de rescate. «Están totalmente interrumpidas las comunicaciones y las carreteras están destruidas», lo que complica las tareas de rescate, precisó Jamie LeSueur de la FICR desde Beira.

Casas y hospitales devastados

Las calles de la ciudad están repletas de árboles arrancados, vidrios rotos y chapas dobladas, constató AFP. «El ciclón fue extremadamente violento y afectó a todos. Destruyó familias, casas, no hay palabras para describirlo», dijo Mohamed Badate, de 24 años, empleado de un negocio de ropa devastado. En la región, casi 10.000 personas están afectadas, 873 viviendas fueron destrozadas así como 24 hospitales y 267 aulas escolares se inundaron, según la autoridad mozambiqueña de gestión de desastres.

Las autoridades de Mozambique y Zimbaue temen, sin embargo, que las consecuencias del ciclón se rebelen aún peores, a medida que avancen las operaciones de rescate. En Mozambique, «varias represas cedieron o alcanzaron su nivel máximo», alertó Emma Beaty de la organización no gubernamental Oxfam.

Zimbabue nunca sufrió la «destrucción de infraestructuras de este nivel», estimó por su parte el ministro de Transportes, Joel Biggie Matiza. Los equipos de rescate se concentraban en la ciudad de Chimanimani (este), en donde una escuela fue parcialmente destruida por un deslizamiento de tierra que dejó al menos tres muertos.

Ante la magnitud de los daños, el presidente del país Emmerson Mnangagwa, regresó ayer de manera precipitada de un viaje a Emiratos Árabes Unidos. «Nuestra nación está profundamente enlutada», declaró.