Veinte niños venezolanos con cáncer, en riesgo de muerte

Pedro GArcía Otero CARACAS / CORRESPONSAL

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Manifestación de trabajadores del Hospital infantil J.M. de los Ríos para pedir el ingreso de ayuda humanitaria
Manifestación de trabajadores del Hospital infantil J.M. de los Ríos para pedir el ingreso de ayuda humanitaria Rayner Peña | Efe

Cruz Roja repartirá 13 toneladas de ayuda a partir de hoy

11 abr 2019 . Actualizado a las 19:51 h.

Venezuela comenzará a recibir a partir de este jueves trece toneladas de ayuda humanitaria de la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICR), un día después de que un grupo de sus directivos se reunieran con Nicolás Maduro y Juan Guaidó. También, un día después de que madres del Hospital J. M. De Los Ríos, el principal centro pediátrico del país, denunciaran que al menos 20 niños con cáncer están en riesgo de morir porque no hay materiales ni médicos para practicarles trasplantes de médula ósea. La portavoz del grupo, Veiloska Martínez, indicó, llorando, que han muerto tres pequeños ya en ese hospital, y que su propio hijo, que necesita un trasplante de médula urgente «me ha dicho que ya está, mamá, que deje de luchar, que lo deje morir».

Al J. M. De Los Ríos asistió esta semana una comisión de la Cruz Roja Internacional que va, además de a donar al hospital medicinas como antipiréticos o antibióticos, a revisar la planta eléctrica. Técnicos del organismo harán una evaluación de la situación de los principales hospitales de Venezuela.

Al anunciar la solicitud de ingreso de la ayuda humanitaria, a finales de marzo, Francesco Rocca, presidente de la FICR, señalaba que «la falta de electricidad no es un problema médico (...) no podemos aceptar que mueran niños por falta de luz». Aunque los niños del J. M. De Los Ríos son los que más suelen ser mencionados en la emergencia que vive Venezuela, Cáritas ha señalado que, hasta el 2018, 13 % de los niños que han evaluado en siete estados del país presentan desnutrición de moderada a severa: un guarismo muy cercano al 15 % en el que se considera que la situación de un país es de crisis humanitaria, según la investigadora Susana Raffalli, ganadora del premio franco-alemán de derechos humanos 2018, que colabora con esa institución de la Iglesia católica.

Durante los recientes apagones, las oenegés han estimado que han muerto unas 70 personas al no poder ser atendidas o por hallarse en unidades de cuidados intensivos que colapsaron por falta de electricidad. 

La crisis y la política

Rocca, al igual que el equipo de la Cruz Roja, han tenido mucho cuidado en manifestar que la ayuda no tiene tinte político, lo que contrasta con la que pretendió introducir Guaidó a finales de febrero, con el apoyo de varios países latinoamericanos y Estados Unidos, y con la negativa reiterada de Maduro a la existencia de una crisis humanitaria en el país.

Aunque la oposición se ha arrogado como un éxito el ingreso de la ayuda de la Cruz Roja, señalando que es un indicador de que Maduro reconoce que en Venezuela hay una emergencia humanitaria, también advertía que «pretenderá politizarla».

El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, llamó a la ONU a reconocer a Juan Guaidó como presidente de Venezuela y a revocar las credenciales del embajador del Gobierno de Nicolás Maduro ante la organización.

Pence informó que ha elaborado un borrador de resolución para presentar en el Consejo de Seguridad, pero es muy poco probable que salga adelante.