Sánchez advierte a los empresarios de que se necesita un nuevo Estatuto de los Trabajadores
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El jefe del Ejecutivo llamó en Sitges a anticiparse al cambio de modelo productivo y de relaciones laborales
02 jun 2019 . Actualizado a las 09:32 h.El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, avanzó ayer que abordará la redacción de un nuevo Estatuto de los Trabajadores para anticiparse al cambio de modelo productivo y de relaciones laborales. Sánchez defendió que crear empleo, y que este sea de calidad, así como garantizar un mercado laboral eficiente y justo será una de las líneas de trabajo del futuro Ejecutivo para ganar productividad en la economía.
En su intervención en la clausura de las jornadas del Círculo de Economía en Sitges, el jefe del Ejecutivo en funciones obvió la pregunta del presidente de la entidad, Juan José Brugera, sobre la apuesta por el diálogo con Cataluña, para centrar su discurso en la necesidad de modernizar la economía y hacerlo desde la justicia social. Así, advirtió a los empresarios de la necesidad de acomodar las normas a la «realidad cambiante» del mercado de trabajo y ha señalado que hay que elaborar un «estatuto de los trabajadores del siglo XXI». Tras recordar la muerte en Barcelona de un repartidor que tenía un trabajo precario, el presidente del Ejecutivo en funciones insistió en la urgencia de dar respuesta a esas nuevas formas de trabajo.
El protagonismo de Europa
Pedro Sánchez también habló de Europa, que, en su opinión, no puede ser «actor secundario» tras Estados Unidos y China, sino «protagonista», y subrayó que España tiene un papel relevante que jugar, no solo con una «presencia importante con peso específico en la Comisión» Europea sino también por su influencia en el proyecto europeo en su conjunto. España tiene la «enorme oportunidad y responsabilidad» de estar entre los países que lideren el futuro del proyecto europeo, sobre todo con la marcha del Reino Unido y ante una Italia «ensimismada», dijo.
A preguntas del presidente del Círculo, habló de fiscalidad, y aunque no quiso dar detalle de los cambios que haría en esta materia, aseguró que lo que quiere su Gobierno es «acabar con la pobreza pero no con la riqueza». Así, apuntó que la política fiscal no es un fin sino un instrumento más para ayudar al «objetivo vital» del país: el crecimiento económico y la redistribución de la riqueza.