Crisis diplomática tras la captura de un petrolero iraní en Gibraltar

La Voz REDACCIÓN

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A.Carrasco Ragel | EFE

España estudia si el abordaje afecta a su soberanía al hacerse en aguas que considera propias, mientras que Teherán tacha la operación de «ilegal» y convoca al embajador británico

04 jul 2019 . Actualizado a las 19:34 h.

El Gobierno de Irán convocó este jueves al embajador británico en el país tras la captura horas antes del superpetrolero Grace 1 por parte de las autoridades de Gibraltar, una operación que también ha generado suspicacias en España, que considera que el abordaje se hizo en sus aguas y estudia presentar una queja ante el Reino Unido. La razón del apresamiento del buque de bandera iraní es que su destino, según sospecha Gibraltar, es Siria, cuyo régimen está sometido a sanciones de la Unión Europea.

«El embajador británico en Teherán ha sido convocado por la interceptación ilegal de un buque iraní en el estrecho de Gibraltar», señaló en Twitter el Ministerio de Exteriores de la república islámica, a lo que el Gobierno británico respondió reiterando el apoyo de Londres a la decisión de las autoridades del Peñón.

El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, informó de que el petrolero fue abordado y detenido a primera hora de este jueves ante la sospecha de que transportaba petróleo crudo con destino a la refinería siria de Banias que, según destacó Picardo, es propiedad de una entidad sujeta a las sanciones impuestas por la UE al régimen de Bachar al Asad.

Las dudas de España

El Gobierno español, por su parte, aseguró tras conocerse la operación que iba a estudiar las circunstancias en que se produjo la operación, llevada a cabo por las fuerzas de seguridad de Gibraltar y la Marina británica, para determinar si afecta a la soberanía española. «Estamos viendo de qué manera afecta a nuestra soberanía, en la medida en que se ha producido en unas aguas cuya soberanía entendemos que es de España», avanzó el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en funciones, Josep Borrell, según recoge Europa Press. Fuentes del ministerio señalaron después que se está estudiando presentar una queja formal ante el Reino Unido.

España no reconoce a Gibraltar más aguas que las de su puerto, porque en el Tratado de Utrecht no se cedieron, pero Reino Unido y las autoridades del Peñón entienden que el mar que rodea el territorio constituyen «aguas territoriales británicas de Gibraltar», por lo que el área es escenario de incidentes frecuentes.

Borrell explicó además que España tenía conocimiento de la operación que se iba a producir y precisó que había patrulleras de la Guardia Civil encargadas de la seguridad en la zona.

Sin embargo, ha añadido que el Gobierno está «estudiando las circunstancias en que se ha producido» la operación, que ha dicho fruto de «una petición de Estados Unidos a Reino Unido».