En una carta a los militantes dice que el laborismo defenderá la permanencia en la UE
09 jul 2019 . Actualizado a las 21:49 h.Tras muchos dimes y diretes y meses en los que la postura laborista no estaba clara, este martes finalmente Jeremy Corbyn pareció dar un paso al frente y tomar las riendas de su partido, exigiendo al futuro nuevo primer ministro británico, previsiblemente Boris Johnson, que convoque un segundo referendo sobre el brexit.
El líder de la oposición, que destaca por jugar a la ambigüedad, anunció, en una carta enviada a los afiliados laboristas tras una reunión de la directiva de su partido, que el laborismo defenderá la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, pese a la gran división de opiniones entre los militantes que quieren frenar el brexit y los que ven necesario respetar el resultado del referendo del 2016.
Por el momento, los dos aspirantes a suceder a Theresa May, Johnson y Jeremy Hunt, dejan incluso la puerta abierta a salir de la UE sin acuerdo, pero Corbyn apuntó a que el laborismo haría campaña por la permanencia y en contra de cualquier acuerdo de los tories que «no proteja la economía ni el empleo».
Corbyn quiere ahora que en septiembre se celebre otro referendo y adelantó que mientras hará «todo lo posible» para «no quitar de la mesa ningún tipo de acuerdo o detener un acuerdo perjudicial del tipo que Hunt o Johnson proponen». Tras anunciar el cambio de postura, explicó en una entrevista en la BBC que no tomó la decisión por presiones dentro su partido, sino que fue fruto de lo que, en su opinión, un líder debería hacer: «Escuchar mucho a los miembros del partido, a los sindicatos y al movimiento laborista en general».
Tras una campaña laborista criticada por su ambigüedad y confusión en el referendo del 2016 y la caída de la formación en las europeas, en las que quedó tercera y perdió casi la mitad de sus eurodiputados, Corbyn parece ahora tomar partido por las bases más proeuropeas de entre su militancia, frente al tercio de los simpatizantes que sí apoyan la salida del país de la UE.
Corbyn quiere evitar así la fuga de más votos hacia partidos como los liberaldemócratas y escucha el mensaje de los sindicatos, que cerraron filas a principios de semana para defender la permanencia en Europa en un hipotético referendo en el que se pueda elegir entre el acuerdo negociado por los conservadores y una salida del bloque sin pacto.
Negociación con May
Hasta el momento, la postura más clara de Corbyn sobre el brexit fue la que llevó a la mesa de negociación planteada por Theresa May a principios de este año, donde defendía la postura laborista como una «alternativa sensata que podría unir al país», incluyendo una unión aduanera, una fuerte relación con el mercado único y la protección de las regulaciones ambientales y los derechos laborales.
Además, Corbyn repite con frecuencia que el país necesita unas elecciones generales porque «después de nueve años de austeridad conservadora», muchas personas no pueden encontrar un trabajo «decente, seguro y bien pagado» y tienen que depender de servicios públicos que han sido gravemente recortados.
Por su parte, los militantes conservadores siguen votando estos días entre el actual ministro de Exteriores, Hunt, y su antecesor en el cargo y gran favorito, Johnson. Finalmente, se conocerá al ganador el próximo 22 de julio y Londres se adentrará en una nueva etapa del brexit.