El Gobierno entrega 30 millones a Marruecos para reforzar los controles fronterizos
19 jul 2019 . Actualizado a las 21:42 h.Nueva jornada de tensión en la valla de Melilla, donde se produjo el segundo salto masivo de este año de inmigrantes a la valla de la ciudad autónoma, tras el registrado el pasado 12 de mayo. Unas doscientas personas intentaron acceder por la fuerza por la zona de muro y alambradas habilitada para separar Marruecos de España. Cincuenta de ellos lo consiguieron al no poder contenerlos los agentes que vigilaban el perímetro. Seis de ellos resultaron con heridas leves en un enfrentamiento en el que se utilizaron piedras y hubo agresiones físicas, según denunció la Asociación Española de Guardias Civiles. Además, dos subsaharianos fueron evacuados en ambulancia, uno con una fractura abierta de tibia y peroné y el otro con diversas contusiones.
Fuentes de la asociación aseguraron que los agentes no contaban con material antidisturbios y reclamaron más protección. «A un puñetazo o una pedrada no se responde con un arma de fuego, pero sí con otro tipo de material antidisturbios que garantice la seguridad del guardia civil y la vida del inmigrante», argumentaron desde la organización.
La entrada irregular se produjo a las siete de la mañana de ayer, por la zona norte de la valla de Melilla. Se trataba de «un grupo organizado» de inmigrantes, que utilizaron garfios, además de piedras y otros objetos como arma arrojadiza contra los agentes, según la Delegación del Gobierno en Melilla. Los inmigrantes fueron detectados en su intento de aproximación al perímetro fronterizo, por lo que la Guardia Civil activó su dispositivo antiintrusión, en el que participaron agentes del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) y el helicóptero de la Guardia Civil, además de tres patrullas de la Policía Nacional y dos de la Policía Local.
También se produjo un rápido despliegue de agentes en el lado marroquí, que interceptaron a unos 70 inmigrantes, mientras que el dispositivo del lado español consiguió detener a otras 25 personas entre el vallado. Sin embargo, pese al operativo policial y la alerta temprana, los inmigrantes lograron dispersarse en un radio de acción superior al kilómetro y medio, lo que permitió que unos 50 de los 200 que intentaron saltar la valla hayan conseguido su propósito de acceder de manera irregular a Melilla y se hayan dirigido corriendo al Centro de Estancia Temporal de Inmigrante. Con esta entrada, el CETI de la ciudad autónoma supera su capacidad máxima de ocupación, estimada en un millar de personas.
El número de inmigrantes que entraron ayer en Melilla es similar al que se produjo el 12 de mayo de este año, cuando 52 personas consiguieron acceder a la ciudad autónoma en un salto a la valla fronteriza protagonizado por alrededor de un centenar de subsaharianos. El medio centenar de este viernes se suman a los 2.498 que han accedido de manera irregular en los primeros seis meses y medio de este año. 2.397 entraron por vía terrestre y 101 por mar.
Cooperación migratoria
El salto se produjo el mismo día en el que el Gobierno decidió aprobar una ayuda de 30 millones de euros a Marruecos para reforzar la cooperación migratoria con este país y contribuir al despliegue en sus actividades en la lucha contra la inmigración irregular.