La opción del «impeachment» a Trump se desinfla tras el testimonio del fiscal Mueller

carlos pérez cruz WASHINGTON / E. LA VOZ

ACTUALIDAD

Donald Trump está usando su veto para saltarse al Congreso
Donald Trump está usando su veto para saltarse al Congreso JONATHAN ERNST

Pese a las evidencias contra el presidente, los demócratas apuestan por las elecciones y los tribunales

26 jul 2019 . Actualizado a las 08:36 h.

Las grandes expectativas pueden ser la antesala de una enorme decepción. La comparecencia ante el Congreso del fiscal especial del Rusiagate, Robert Mueller, ansiada como la llegada de un mesías por los detractores de Donald Trump, terminó, si no en fracaso, en frustración. Ya lo había anticipado él mismo y no fue más allá de lo que recoge su famoso informe. Se ciñó a su rol, que es tanto como no entrar en el fango político, por lo que no aportó el gran titular que podría impulsar el juicio político del Congreso. Salvo milagro bíblico, el impeachment contra Trump ha muerto.

El anodino y vacilante testimonio de Mueller confirmó, sin embargo, que hay fundamento para demandar al presidente por un delito de obstrucción a la Justicia. Pero no son tiempos estos para evidencias sino para relatos, que es como se seduce al electorado. El de la «caza de brujas» del presidente ha calado entre su base, con la ayuda inestimable de un Partido Republicano rendido a sus pies y del aparato propagandístico de la extrema derecha a pleno rendimiento. Trump no tiene ningún rubor en dinamitar la confianza de la población en las instituciones de su país, como el FBI, o en destruir la reputación del propio Robert Mueller, irónicamente un republicano.

Nancy Pelosi, líder demócrata en la Cámara de Representantes, lleva meses poniendo freno a las ansias de impeachment del ala más progresista de su partido. Lo dicho por Mueller le dio para hablar de «encubrimiento» y de acciones que «podrían haber puesto en riesgo la seguridad» de Estados Unidos.

Pero Pelosi no pasó de seguir defendiendo el escrutinio del Congreso y confiar en los procesos abiertos en los tribunales. A pesar de que reconoce que hay base probable para un impeachment, el prestigioso analista electoral John Zogby aconsejaba ayer a los demócratas centrarse en ganar a Trump en el 2020 y dejar a los jueces determinar la culpabilidad del presidente una vez deje de serlo. Lo contrario, advierte, regalaría a Donald Trump «el papel de víctima». 

Revés judicial para Trump

Es en los tribunales donde la oposición al mandatario estadounidense ha conseguido poner freno a algunas de sus políticas más conflictivas. El presidente pasó el miércoles del «respeto» a los jueces a la condena de la «tiranía de un sistema disfuncional» Por la mañana, un juez del distrito de Columbia, nombrado por el propio Trump, denegaba la moción interpuesta por grupos de defensa de los inmigrantes para paralizar la nueva directiva de asilo, que entró en vigor la semana pasada y elimina de facto este derecho para quienes llegan por México, al obligar a solicitarlo antes en otro país. Horas después, un juez de San Francisco la bloqueó argumentando que existe una «montaña» de evidencias de que México no puede ofrecer refugio seguro a los emigrantes centroamericanos.

El juez californiano esgrimió igualmente que la Administración Trump no tiene autoridad para saltarse al Congreso, algo que ha vuelto a hacer el presidente esta semana al hacer uso de poder de su veto para ignorar la prohibición de vender armas a Arabia Saudí.