El príncipe Andrés de Inglaterra se refugia en Cádiz tras las acusaciones de estar involucrado en el caso Epstein

A. P. LA VOZ

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TOBY MELVILLE

La prensa británica sugiere que el duque de York se ha retirado para escapar de las especulaciones que rodean una imagen en la que sale con una menor

18 ago 2019 . Actualizado a las 10:53 h.

Días después de la muerte del magnate acusado de acosos sexuales Jeffrey Epstein, la polémica sigue acechando a la familia real británica. El príncipe Andrés de Inglaterra se encuentra en medio del proceso judicial contra su amigo, al ser investigado por una foto en la que sale rodeando con el brazo a una menor con la que supuestamente se acostó. En un intento por escapar de las especulaciones, el príncipe decidió refugiarse con su mujer, Sarah Ferguson, en una villa de Balmoral (Cádiz), según adelantaba el diario británico The Guardian

La joven, conocida como Virginia Giuffre Roberts, aseguró que Epstein la había obligado a mantener relaciones sexuales con el duque de York durante tres años seguidos cuando ella aún no había cumplido la mayoría de edad. 

El príncipe Andrés, al que Isabel II mostró su apoyo sentándose junto a él en la iglesia apenas un día después de que se reavivase el caso Epstein, también fue acusado de tocarle el pecho a otra menor en el 2001. «Sólo recuerdo que alguien sugirió una foto y nos dijo que fuésemos al sofá. Entonces Andrés y Virginia se sentaron en él y pusieron la marioneta en uno de los regazos [de ella]. Yo me senté por mi propia voluntad en el de él y, cuando pusieron la mano del muñeco en el pecho de Virginia, Andrés puso la suya en el mío. Decían que era una broma», recuerda Johanna Sjoberg según los documentos hechos públicos por la justicia estadounidense.

Sobre todas las acusaciones que se están lanzando hacia el duque de York, Buckingham Palace siempre ha mantenido la misma postura: «Las acusaciones son falsas y no tienen ningún fundamento». 

Giuffre sacó a la luz todos estos hechos ante un jurado de Florida, Estados Unidos, donde aseguró que las relaciones sexuales que le habían obligado a mantener habían ocurrido en hasta tres localizaciones diferentes: Londres, Nueva York y el Caribe. En ese momento un juez desestimó las acusaciones contra el príncipe por ser «inmateriales e impertinentes para la causa central» al no saberse a ciencia cierta si el británico realmente mantuvo relaciones con Giuffre o si realmente sabía que en ese momento todavía no tenía los 18 años.

La prensa británica sugiere que estos hechos podrían cobrar relevancia ahora, motivo principal por el que Andrés se refugiaría en Cádiz, ya que el Jurado de Apelaciones de los Estados Unidos está a punto de publicar un dosier de hasta 2.000 páginas con detalles del caso en las que se señala a «importantes políticos americanos, poderosos empresarios, presidentes extranjeros, un importante primer ministro y otros líderes mundiales». El caso Epstein no se da por cerrado y podría ampliar así su nombre a otras muchas celebridades.