Sánchez: «Los radicales serán identificados y no habrá impunidad»

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

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PIROSCHKA VAN DE WOUW | REUTERS

El presidente del Gobierno acusa a Torra de «banalizar y frivolizar» con la violencia

18 oct 2019 . Actualizado a las 17:03 h.

En la línea ofrecida esta mañana por el Ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, Pedro Sánchez garantizó que «no habrá impunidad» para los radicales, quienes «más pronto que tarde serán identificados y conducidos ante la Justicia para que reciban la sanción que les corresponde».

El presidente del Gobierno en funciones compareció este mediodía en Bruselas para valorar el acuerdo del bréxit, aunque la tormentosa semana que está viviendo Cataluña desde la sentencia del Supremo acabó por acaparar buena parte de la comparecencia. Sánchez volvió a reiterar que aunque su Gobierno tiene «previsto» todos los escenarios posibles, en sus planes más inmediatos no está ni la aplicación de la Ley de Seguridad Ciudadana ni el artículo 155 de la Constitución. La primera, porque no le encuentra sentido a unificar bajo un mando único a los distintos cuerpos policiales debido a que su coordinación hasta la fecha está siendo «modélica», afirmó. El 155, porque por el momento sería desproporcionado para los niveles a los que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha trasladado su desafío.

El titular del Gobierno catalán dio a entender ayer en el parlamento autonómico que volvería a convocar un nuevo referendo ilegal de autodeterminación. Este viernes encontró la respuesta de Sánchez: «No se puede repetir un camino que ha llenado de frustración, de fracaso y de fractura a la sociedad catalana. Es importante que Torra entienda que la sociedad catalana hoy está dividida, fracturada. Y el independentismo debe reconocer a la otra parte. Pueden tener una mayoría parlamentaria, por la ley electoral, pero no tienen una mayoría social», aseguró un Sánchez deseoso de abrir «una nueva etapa» que no esté «judicializada» tras el cierre de la anterior con la sentencia de los líderes del Procés.

Sánchez acusó a Torra de tener un discurso «cada vez más radical», afeándole una «banalización y frivolización de la violencia». No obstante, de momento mantendrá su estrategia de «moderación», al entender que «la ponderación de las medidas contribuyen a calmar los ánimos y a reconducir las situaciones».