Algo más de 2.600 empleados se acogen al nuevo plan de bajas voluntarias
05 nov 2019 . Actualizado a las 08:42 h.Un total de 2.636 trabajadores de Telefónica, el 10,4 % de la plantilla en España, se han adherido de forma voluntaria al plan de suspensión individual de empleo (PSI), que impulsó la empresa como una medida estratégica para mejorar su resultado, según fuentes de la operadora. Se van a casa de forma voluntaria los empleados de 53 años o más con el 68 % del sueldo bruto. La compañía se compromete a completarles las prestaciones sociales necesarias hasta que alcancen la edad de jubilación.
La empresa preveía dedicar 1.600 millones para afrontar este proceso, que le supondría, según sus cálculos, un ahorro en gastos directos de unos 220 millones anuales a partir del 2021, en función de los empleados adscritos, según informó Telefónica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La operadora ha afirmado este lunes que el volumen de adhesiones a este plan es «similar» al del anterior. Fuentes sindicales han asegurado a Efe que la empresa calculaba inicialmente que se acogiesen unos 3.000 trabajadores.
A cierre de junio, la plantilla total era de 25.353 empleados, según las fuentes sindicales.
A todos los que se han inscrito a este plan se les ha suspendido ya el contrato, salvo a los que cumplan 53 años en noviembre y diciembre, que irán saliendo a medida de que vayan teniendo la edad estipulada.
Los centros de Telefónica de todas las comunidades autónomas se vieron afectadas por este plan, aunque de forma desigual.
El acuerdo del PSI coincidió con el del convenio colectivo para los próximos tres años, que contempla, entre otros puntos, una subida salarial para toda la plantilla del 1,5 %.
