Los militares bloquean el acceso al palacio presidencial ante el aumento de la tensión por la víctima mortal y un discurso del presidente
13 nov 2019 . Actualizado a las 19:35 h.Al eslogan «Revolución», que desde hace 28 días corean los libaneses, se añadió este miércoles «Saludemos a los mártires», después de que de madrugada un oficial del Ejército matara de un tiro a Alaa Abou Fakher, un manifestante que junto a otros trataba de bloquear una carretera en Khalde, al sur de Beirut. Un vídeo compartido en redes sociales muestra a Alaa tendido en el suelo en un charco de sangre. Fue trasladado al hospital, pero sucumbió a sus heridas. Según el líder druso Walid Yumbla, Alaa Abu Fajer es miembro de su formación, el Partido Socialista Progresista.
En un comunicado el Ejército justificó que el oficial se vio forzado a dispersar a tiros a «un grupo de manifestantes que cruzó la carretera y se enfrentó a los militares», con el resultado de un herido. El oficial que disparó ha sido puesto a disposición judicial. Se trata de la primera muerte a manos del Ejército desde el inicio de las protestas, pero no es la primera víctima mortal: dos obreros sirios murieron atrapados en un edificio incendiado por los manifestantes el 18 de octubre, y el joven Huseín al Attar fue herido mortalmente por otro hombre mientras bloqueaba una carretera el 19 de octubre.
«¡Vuelve al planeta tierra Aoun!»
La ira de los manifestantes se acrecentó con el discurso del presidente libanés, Michel Aoun, la noche del martes. El Ejército libanés bloqueo el acceso que llevan al palacio presidencial de Baabda, ante la llegada de un centenar de manifestantes a ese lugar en repulsa por las palabras de Aoun y por la muerte del manifestante tiroteado. Fotos de Alaa colgaban de la alambrada de espinos que instaló el Ejército en mitad de la autopista hacia Baabda.
En su discurso, Aoun anunció consultas parlamentarias esta semana para formar un nuevo Gobierno, pero afirmó que este no podía ser «puramente tecnocrático» como piden los manifestantes, sino que debe incluir políticos. «¿Dónde los puedo encontrar? ¿En la Luna?», dijo sobre los independientes tecnócratas que podrían asumir el Ejecutivo. Raquel, de 27 años y en paro, le responde con su pancarta «Aoun, ¡vuelve al planeta Tierra!”. La joven dice que ya no tiene esperanzas. «Es hora del cambio, pero creo que no nos escucha», lamenta.
Pero la declaración más incendiaria de Aoun la dirigió a los que protestan en las calles: «Si no hay personas decentes entre los manifestantes para abrir un diálogo, que emigren» dijo. Sabine Yahine, de 27 años, ingeniera en paro, respondió al mandatario ante una corona funeraria en honor a Alaa: «No señor presidente, nosotros no nos vamos, en honor a la sangre de este hombre que fue derramada frente a su hijo, hermana y mujer».
En Jal al Dib, en el este de Beirut, varios hombres armados amenazaron a los manifestantes. Sabine dice que reza para que no se derrame más sangre, «pero esto es una revolución» añade. Poco después los manifestantes bloquearon los accesos.