El ala izquierda del SPD promoverá una consulta sobre la gran coalición

patricia baelo BERLÍN / CORRESPONSAL

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Norbert Walter-Borjans y Saskia Esken se impusieron como nuevos líderes del SPD en la consulta a la militancia
Norbert Walter-Borjans y Saskia Esken se impusieron como nuevos líderes del SPD en la consulta a la militancia OMER MESSINGER | Efe

La cúpula de la formación descarta una salida precipitada del Gobierno alemán

06 dic 2019 . Actualizado a las 09:57 h.

Ante el cisma evidente entre las dos corrientes del partido, una más izquierdista y otra más centrista, la cúpula del SPD se empeñaba este jueves en demostrar unidad. Una unidad necesaria, pues este viernes arranca en Berlín el congreso anual en el que los 600 delegados de los socialdemócratas alemanes decidirán qué rumbo adoptar para intentar recuperar identidad y salir de la crisis en la que están sumidos y que les sitúa como cuarta fuerza política del país en intención de voto, por detrás de los conservadores de la CDU, Los Verdes, y la ultraderechista AfD.

Reunida desde hace dos días, la Ejecutiva de la formación aprobó el borrador de la hoja de ruta con la que quieren sentarse a negociar con sus socios de Gobierno, el bloque integrado por la CDU y la CSU, coincidiendo con el ecuador de la legislatura. El documento incluye un aumento del salario mínimo, subir los impuestos a las emisiones de CO2 para recaudar más fondos con los que combatir el cambio climático y más inversión pública, incluso aunque eso implique endeudarse y violar el mantra conservador del déficit cero. 

Presión a los dos líderes

«Un buen compromiso en la dirección correcta». Así lo calificó Saskia Esken, que junto a Norbert Walter-Borjans salió elegida el fin de semana pasado nueva líder de la formación socialdemócrata. El dúo, situado en el ala más izquierdista del partido y crítica ante la perspectiva de seguir desgastándose en el Ejecutivo de gran coalición, se impuso contra todo pronóstico a los centristas Olaf Scholz, actual vicecanciller, y Klara Geywitz.

Pese a que Esken y Walter-Borjans aún deben ser ratificados, algo que ocurrirá previsiblemente este viernes en el marco del congreso, ya están sometidos a una enorme presión.

Al margen de las cuestiones programáticas, su mayor reto ahora es tratar de acercar posturas entre sus correligionarios, divididos entre aquellos que apuestan por romper la alianza de Gobierno para intentar regenerarse en la bancada opositora, y los que prefieren continuar. «No se trata de salir precipitadamente, se trata de contenidos, y no de si sí o si no», declaró Walter-Borjans, quien adelantó que el borrador de la hoja de ruta que someterán a votación en el congreso no plantea la posibilidad de una ruptura con el Ejecutivo.

Sus palabras, que implican un viraje en el discurso hacia un tono más moderado, no han caído bien en la fracción izquierdista del SPD, que anunció este jueves su intención de presentar una moción para forzar un voto sobre la permanencia o no en la gran coalición como socios minoritarios. «Los delegados esperan que en el congreso se produzca una decisión sobre el balance de la alianza y, a partir de ahí, una decisión sobre la permanencia», dijo la diputada socialista Hilde Mattheis al diario Passauer Neue Presse

Silencio en la CDU

Su línea podría salir reforzada, si finalmente el líder de las juventudes socialdemócratas, el crítico Kevin Kühnert, resultara elegido como uno de los dos vicejefes de la formación. Entretanto la canciller alemana opta por la cautela, y prefirió no expresarse al respecto. Tanto Angela Merkel como su delfina y líder de la CDU, Annegret Kramp-Karrenbauer, rechazaron esta semana la idea de revisar el contrato de coalición que sellaron con el SPD en marzo del 2018. Aunque sí se mostraron abiertas al diálogo con sus socios.