Macron, obligado a romper su silencio cuando la huelga cumple 25 días

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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Los chalecos amarillos participaron en la manifestación del sábado en Paris
Los chalecos amarillos participaron en la manifestación del sábado en Paris CHRISTOPHE PETIT TESSON | Efe

La huelga de transportes en Francia, a punto de superar todos los récords

30 dic 2019 . Actualizado a las 09:15 h.

Con la huelga de los ferrocarriles franceses y el transporte metropolitano de París cerca de marcar un récord de duración, Emmanuel Macron parece obligado a hablar sobre el paro contra la reforma pensiones en su discurso televisado de año nuevo.

El presidente francés se ha abstenido de intervenir personalmente en la crisis, dejando al primer ministro, Edouard Philippe, la carga de afrontar la movilización. Pero, en las protestas de este fin de semana los manifestantes no dejaron de corear «Macron, tu silencio nos está matando». El discurso televisado del jefe de Estado del 31 de diciembre apuntará a calmar las tensiones, según recogen los medios franceses de fuentes del Elíseo. Es probable que exprese su pesar por las personas que han visto afectados su planes de viaje, reconozca el derecho constitucional a la huelga y llame al diálogo.

Tras 25 días de paro, que se cumplieron este domingo, ya se han sobrepasado las 22 jornadas de duración de las movilizaciones en 1995 también contra una reforma de pensiones que en aquella ocasión fue retirada por el entonces primer ministro, el conservador Alain Juppé, precisamente el mentor del actual, Édouard Philippe. Juppé tuvo que doblegarse entonces ante una opinión pública que se oponía a sus planes de suprimir los regímenes especiales de pensiones bajo la presión de los millones de personas que, como ahora, veían perturbados sus desplazamientos cotidianos, informa Efe.

El Gobierno de Macron ha presionado, sin éxito, a los huelguistas para que suspendieran los paros durante las vacaciones de Navidad con el argumento de dar una tregua a los franceses que viajan en estas fechas para reunirse con sus familias. Sin embargo, tampoco ha mostrado prisa para abrir una nueva ronda de negociaciones. El primer ministro anunció que esa ronda comenzará el 7 de enero, es decir una vez que hayan finalizado las vacaciones y a dos días de una nueva jornada de manifestaciones nacionales convocada por los sindicatos. Precisamente, la disputa dialéctica entre el Ejecutivo y la principal central que alienta las protestas, la CGT, ha subido de tono en las últimas horas.

En una entrevista publicada ayer en el semanario Le Journal Du Dimanche, el líder de la CGT, Philippe Martinez, acusa al Gobierno de «haber armado este lío», a lo que el secretario de Estado de Transportes, Jean Baptiste Djebbari, le replica en esas mismas páginas que su sindicato «practica el bloqueo y la intimidación». La incidencia de la huelga tiene una fuerte repercusión sobre la vida cotidiana de los franceses, toda vez que los servicios mínimos no existen en el transporte público terrestre en Francia.