Rodríguez Uribes en Cultura, Juan Carlos Campo en Justicia, y Carolina Darias en una vaciada cartera de Política Territorial son los últimos nombres de los 18 ministros y cuatro vicepresidentes dados a conocer
12 ene 2020 . Actualizado a las 09:44 h.El nombre del responsable del Ministerio de Justicia, el magistrado Juan Carlos Campo, cerró la formación del que será el primer Gobierno de coalición desde la restauración de la democracia, que finalmente estará conformado por la presidencia, cuatro vicepresidencias y 18 ministros, un total de 23 sillas en los Consejos de Ministros de los viernes.
Fuentes autorizadas de la Moncloa desvelaron ayer que la canaria Carolina Darias se hará cargo del departamento de Política Territorial y Función Pública, aunque no tendrá grandes responsabilidades para lidiar con el desafío secesionista, que al ser una de las cuestiones claves de esta legislatura lo asumirán Presidencia y la vicepresidenta Calvo. Por su parte, el exdelegado del Gobierno en Madrid y portavoz adjunto del PSOE en la Asamblea, José Manuel Rodríguez Uribes, sustituirá a José Guirao como máximo responsable de Cultura y Deporte.
Estos nombres se unen a los ya confirmados de Calvo (vicepresidencia primera , Ministerio de la Presidencia y Relaciones con las Cortes), Calviño (vicepresidenta económica), Ribera (vicepresidenta para la Transición Energética y el Reto Demográfico), Ábalos (Transportes, Movilidad y Agenda Urbana), Marlaska (Interior), Planas (Agricultura), Illa (Sanidad), Montero (Hacienda), Maroto (Industria), Escrivá (Seguridad Social), Celaá (Educación), Robles (Defensa), Duque (Ciencia) y González Laya (Exteriores). La cuota de Unidas Podemos está conformada por el vicepresidente social Pablo Iglesias y sus cuatro ministros: Montero (Igualdad), Díaz (Empleo), Garzón (Consumo) y Castells (Universidades).
Antes de conocerse el nombre de Campo para Justicia, las quinielas apuntaban a que la cartera recaería en una mujer para desempatar el equilibrio de géneros y permitirle a la Moncloa poder seguir presumiendo de tener un Consejo de Ministras.
A pesar de que la comunicación con el rey ha sido fluida durante de toda la semana, Sánchez cumplirá con la formalidad de trasladarle a Felipe VI el nombre de los integrantes de su Gobierno antes de comparecer en la Moncloa en una intervención prevista para las 14.00 horas. Según trasladaron ayer fuentes del Ejecutivo, será una declaración institucional, por lo que en principio no se permitirán preguntas de la prensa.
Legislatura agitada
Sánchez tiene ya su Gobierno de choque, aunque nadie se atreve a augurar la longevidad de la legislatura que acaba de ponerse a andar, y todos coinciden en que será agitada y repleta de curvas y enfrentamientos entre las distintas fuerzas políticas, tal y como se anticipó en el debate de investidura.
El presidente del Gobierno se ha rodeado de un equipo equilibrado entre el núcleo duro de su partido e independientes con un marcado perfil económico para afrontar la batalla política, pero sin desatender las finanzas. Sánchez necesitará un ojo más del par del que dispone. Uno para atender los asuntos económicos, otro para vigilar de cerca a una oposición capitaneada por el PP, que no ofrecerá tregua. Casado lamentó ayer que «quien va a formar parte del Gobierno», en referencia a Podemos, participase en una marcha «de apoyo a los presos de ETA». «¿De qué parte está Sánchez?», cuestionó el líder popular. Pero en la oposición, Vox también contará con un importante protagonismo. Los de Abascal realizan una llamada a sus huestes para que este domingo se concentren frente a cada uno de los 8.131 ayuntamientos para mostrar el rechazo al nuevo Gobierno.
El tercer ojo que necesita Sánchez es para no perder de vista a sus socios, consciente que tras los abrazos y las buenas palabras, llegarán las puñaladas. Para que sean lo menos profundas posibles se ha cuidado bien en diluir al máximo a Iglesias y a sus ministros en cuatro vicepresidencias y un Consejo multitudinario.
La portavoz de Podemos, Noelia Vera, secretaria de Estado de Igualdad
Pablo Iglesias continúa introduciendo en el Gobierno a integrantes del núcleo duro de Podemos. La portavoz de la ejecutiva de la formación, Noelia Vera, será la próxima secretaria de Estado de Igualdad, por lo que, al igual que la jueza en excedencia Victoria Rosell (delegada del Gobierno contra la Violencia de Género), su trabajo también dependerá del Ministerio que dirigirá Irene Montero, que a su vez está subordinado a la vicepresidencia de Iglesias.