Los planes de Johnson para atraer talento, en riesgo por las costosas tarifas de las visas del Reino Unido

juan francisco alonso LONDRES / E. LA VOZ

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El personal médico, de enfermería o científico que quiera instalarse en el Reino Unido necesita unas 21.299 libras (25.000 euros) para lograr el permiso de residencia por cinco años para el aspirante y su familia

21 feb 2020 . Actualizado a las 09:08 h.

Los planes de Boris Johnson para atraer «a las mentes más talentosas» del mundo podría terminar en fiasco por el elevado coste de las visas británicas. Lo advierte el Instituto para el Gobierno (IFG), un prestigioso centro de estudios que apunta que las universidades y sobre todo la sanidad pública podrían tener graves problemas para cubrir las vacantes una vez que venza el período de transición el 31 de diciembre.

En un informe publicado por The Guardian, el IFG indicó que el personal médico, de enfermería o científico que quiera instalarse en el Reino Unido necesita unas 21.299 libras (25.000 euros) para lograr el permiso de residencia por cinco años para el aspirante y su familia, si esta es de cinco miembros. Si no tuviera hijos o fuera soltero los precios son de 6.500 libras (7.754 euros) y 3.220 (3.817 euros), respectivamente.

En el informe se apunta que los montos por las visas británicas de trabajo superan con creces a los de países como Australia, Canadá o Alemania. En este último un trabajador extranjero que pretenda radicarse en el país con su familia solo debe pagar 756 libras (900 euros) por el permiso para residir cinco años.

El IFG advirtió al Gobierno de que estos costos son prohibitivos para enfermeras, técnicos de laboratorio, ingenieros y científicos extranjeros, incluidos los provenientes de la UE, que a partir del 1 de enero deberán recurrir al llamado programa de visas Global Talent o al nuevo sistema de inmigración por puntos. Este no solo exige al aspirante a un permiso de trabajo tener conocimientos de inglés sino una oferta laboral con un salario mínimo de 20.480 libras anuales (24.440 euros) para sectores como la sanidad pública o la asistencia social.

Desde el referendo del 2016 en el que la mayoría de los británicos votaron a favor del brexit el Servicio Nacional de Salud (NHS, en inglés) ha visto como 10.000 trabajadores, entre médicos y enfermeras, oriundos de los otros 27 países de bloque comunitario han hecho las maletas y se han ido. Este éxodo de personal ha agravado la crisis que atraviesa el sistema y por eso Johnson prometió en su campaña que contrataría a 20.000 enfermeras.

Hasta el 2019 había unos 1.120 médicos españoles trabajando en la sanidad británica, de acuerdo con el Consejo General Médico (GMC). Asimismo entre 3.500 y 5.000 científicos e investigadores trabajaban en universidades y empresas, según las cifras de la Sociedad de Científicos Españoles en el Reino Unido, pero estos números podrían verse reducidos o al menos mantenerse en el tiempo, debido a que las nuevas normas migratorias no hacen atractivo el país.