«Tengo que dejar el calzado en cuarentena al menos 48 horas»

R. D. Seoane A CORUÑA / LA VOZ

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CESAR QUIÁN

«¡Deseando no ya volver, supervolver!», exclamaba ayer este empresario especializado en alpargatas y zapatillas de casa «que la gente habrá gastado mucho»

11 may 2020 . Actualizado a las 12:47 h.

Jorge Pérez ultimaba ayer por la mañana en la céntrica calle Galera de A Coruña el escaparate de su tienda, Loyna, sin disimular esa mezcla de ilusión y expectación. «¡Deseando no ya volver, supervolver!», exclamaba este empresario especializado en alpargatas y zapatillas de casa «que la gente habrá gastado mucho», bromeaba sobre la esperanza de que sean muchos los que, desde hoy mismo, acudan tanto a reponer calzado de interior como a probar la nueva colección primavera-verano para regresar a las calles.

Solo un cliente dentro de la tienda, gel hidroalcohólico y calzas son solo algunas de las medidas que tomarán para garantizar toda la protección. «¿El calzado? Lo tengo que dejar en cuarentena al menos 48 horas, y eso que daremos calcetines plásticos para probarlos, pero por si acaso», explica Pérez. No será eso problema alguno y que nadie piense que va a tener que esperar dos días para encontrar su número, porque «tenemos mercancía de sobra, Castañer nos manda toda la colección y si no, pedimos más», insiste el comerciante.

La semana pasada, con la cita previa «me llevé alguna sorpresa, hubo algún día que tuvimos movimiento», explicaba sobre las perspectivas de cara a la reapertura de la tienda en horario habitual. «Que la gente se eche a comprar... estamos un poco asustados de cómo va a reaccionar, pero estoy animado, confío en que muchos decidan apoyar al pequeño comercio», valoraba. Él, con su socio, están poniendo todo de su parte y algún gancho a mayores, como poner a la venta en exclusiva los Miista, los zapatos gallegos que arrasan en Londres.