Marlaska trata de superar la crisis en la Guardia Civil con una subida de sueldo

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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El general Laurentino Ceña observa a Marlaska en la toma de posesión de María Gámez como directora de la Guardia Civil
J.J. Guillén | Efe

El número dos del instituto armado dimite tras el cese del coronel Pérez de los Cobos

27 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La decisión de Fernando Grande-Marlaska de destituir al coronel Diego Pérez de los Cobos como jefe de la Comandancia de Madrid tras la entrega a la jueza Carmen Rodríguez-Medel, que investiga las manifestaciones del 8M, de un informe que apunta a presuntas responsabilidades penales del Gobierno, ha situado al ministro de Interior en el centro de la polémica. El director adjunto operativo (DAO) de la Guardia Civil, el general Laurentino Ceña, presentó ayer su dimisión y la justificó en el fracaso en su intento de que Marlaska parara el cese de Pérez de los Cobos. Solo unas horas después de la renuncia del número dos de la Guardia Civil, el titular de Interior compareció de forma improvisada tras el Consejo de Ministros para tratar de apaciguar el descontento en el instituto armado anunciando un aumento de sueldo para todos los agentes y negar que el cese y la dimisión de los dos mandos del instituto armado tengan relación con el informe dado a la jueza.

«La sustitución, cese, del coronel Pérez de los Cobos es única y exclusivamente debida a la política razonable de constitución de nuevos equipos», indicó Marlaska, que aseguró que «no hay ninguna relación ni circunstancia extraña» detrás de ese cese ni de la dimisión. Según el ministro, en el caso de Ceña su relevo estaba previsto para el 23 de marzo y se decidió que continuara hasta el 13 de mayo, cuando culminaban los actos del 175 aniversario de la Guardia Civil. Pero, por las circunstancias de la pandemia, su mandato se había prorrogado hasta el 2 de junio. «Ya no iba a formar parte del nuevo equipo», precisó. Respecto a Pérez de los Cobos, admitió que «el coronel nunca pidió su cese», pero lo enmarcó también en el deseo de la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, y del secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez Ruiz, de rodearse de mandos que sean de su total confianza.

Salas Moreno será nuevo DAO

El nuevo director adjunto operativo de la Guardia Civil que sustituye a Ceña será el general de división Pablo Salas Moreno, que previamente será ascendido al grado de teniente general. Hasta ahora, Salas era el jefe del servicio de Información de la Guardia Civil y se le considera un experto en antiterrorismo. El ministro se refirió a las presuntas responsabilidades delictivas que se derivan del informe de la Guardia Civil y recordó que, además de la manifestación del 8M, en esas fechas hubo «actos políticos», destacando el congreso de Vox celebrado en el palacio de Vistalegre. Y añadió que le «entristece» que «todo se focalice en el 8M», que es, según dijo, el «iceberg de las políticas de igualdad». Aunque alabó el currículo y la trayectoria de Pérez de los Cobos y de Ceña, aseguró que en la Guardia Civil hay muchos otros agentes con la misma capacidad que los dos mandos ahora apartados que pueden desarrollar su labor con eficacia.

En medio de polémica, Marlaska anunció la aprobación del último tramo de la equiparación salarial de guardias civiles y policías nacionales con las policías autonómicas, lo que supone un gasto de 247 millones de euros para el aumento de las nóminas de ambos cuerpos, con lo que sus salarios se verán incrementados en un 20 % desde la posición anterior al proceso de equiparación. Las nóminas se aumentarán con carácter retroactivo desde el 1 de enero del 2020.

El ministro desligó también ese aumento de sueldo de los polémicos ceses y dimisiones y aseguró que la equiparación salarial era un compromiso asumido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y no se lleva al Consejo de Ministros «en un día».

El PP pide la dimisión inmediata del ministro del Interior 

La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, reclamó que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, «debe dimitir» tras el cese del coronel Diego Pérez los Cobos, jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid.

«Fernando Grande-Marlaska debe dimitir. Punto», indicó escueta la portavoz de los populares en un mensaje en Twitter poco después de la comparecencia del ministro en la Moncloa.

Tras esa comparecencia de Marlaska, el PP exigió al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, la «destitución inmediata» del ministro del Interior por el «ataque más grave a la independencia del Poder Judicial ocurrido en España en los últimos años» tras el «arbitrario cese» de Pérez de los Cobos.

Teodoro García Egea mostró su solidaridad con el instituto armado y lamentó que «este Gobierno está más cerca de Bildu que de la Guardia Civil». «Como ministro, desconoce las reglas básicas de la independencia judicial. Como juez, ignora los más elementales principios del procedimiento judicial. Como político, renuncia a asumir responsabilidades. Cuando todo cae alrededor, no vale seguir corriendo», subrayó el portavoz adjunto del Grupo Popular, Mario Garcés.

«Lo echan porque se metió con el Gobierno», festejan los independentistas la caída del encargado del 1-O 

El único aliado que el Gobierno encontró para apoyar la destitución de Diego Pérez de los Cobos fue el independentismo catalán más radical. Carles Puigdemont, huido a Bélgica tras la aplicación del 155 que el coronel de la Guardia Civil aplicó sobre el terreno, aseguró que no le extrañaba que se hayan descubierto «las deslealtades y mentiras de un personaje siniestro». «Han probado su propia medicina. No le tendrían que haber renovado en el cargo. Y dada su actuación en lo que pasó el 1-O debería estar en un juicio: no como testigo, como acusado», zanjó.

El exconsejero catalán Joaquim Forn reprochó al ministro del Interior que haya destituido al coronel de la Guardia Civil «solo cuando le han tocado a un miembro de su Gobierno», puesto que siempre habían «bendecido» su actuación ante el 1-O.

Más allá fue el miembro de la Mesa del Congreso Gerardo Pisarello (En Comú), que tildó de «falso» el informe sobre la manifestación del 8M y el coronavirus que provocó la destitución de Pérez de los Cobos. Pisarello afirmó que la investigación abierta por la juez Carmen Rodríguez Medel proviene de «noticias falsas, informes falsos y la posverdad» con la finalidad de debilitar al Gobierno.

Apoyo de los profesionales

En el otro extremo, las asociaciones de guardias civiles valoraron que el director adjunto operativo (DAO), Laurentino Ceña, fuera fiel a los principios del cuerpo y dimitiera tras el cese del jefe de la Comandancia de Madrid, y criticaron las «injerencias políticas» en el instituto armado, llegando algunas a pedir la dimisión del ministro.

La asociación mayoritaria, la Asociación Unificada de Guardias Civiles, lamentó que un mando «con una hoja de servicios intachable tenga que acabar sus servicios mostrando su descontento con una decisión política», dijo su portavoz, Juan Fernández, que insistió en que denunció «un exceso de autoridad por parte del ministro del Interior».

Mas País, aliado del Gobierno, critica el cese: «No era el mejor momento» 

El portavoz de Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà, indicó que, si bien se le ocurren «muchos motivos» para cesar a López de los Cobos, a quien acusó de «participar de forma voluntaria en el 23F», le resulta extraño «que sea destituido en mitad de una investigación judicial y sin dar explicaciones». Por ello, solicitó al ministro del Interior que aporte explicaciones «con total transparencia si es que no tiene nada que ocultar».

Además, Rita Maestre, admitió que no tenían que haberse producido «muchos eventos masivos», como «la feria de educación de Ifema o manifestaciones del 8M» pero «es fácil decirlo a posteriori».