El presidente insiste en la existencia de una unidad parapolicial creada para favorecer al PP a su llegada al Gobierno
08 jun 2020 . Actualizado a las 08:39 h.«Cuenta con toda mi confianza». Sánchez volvió a mostrar ayer su respaldo al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, cuya salida del Gobierno reclaman al unísono las principales fuerzas de la oposición por sus supuestas «injerencias» en una investigación de la Guardia Civil al Gobierno y tras haber mentido en sede parlamentaria.
El presidente del Gobierno volvió a mostrar así su confianza en el exmagsitrado de la Audiencia Nacional tan solo unos días después de defender su trabajo en sede parlamentaria al destacarlo como uno de los grandes artífices de estar descabezando a la llamada «policía patriótica». El presidente del Gobierno fue cuestionado ayer en la rueda de prensa posterior a la conferencia con los presidentes autonómicos sobre este asunto, y si incluía dentro de este contexto la destitución por parte de Marlaska del hasta ahora máximo responsable de la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid, el coronel Diego Pérez de los Cobos. «Cuando llegamos al Gobierno hace dos años había un caso que está ahora mismo en los tribunales, un uso fraudulento por parte de la anterior administración, la creación de una parapolicía. Si hay un ministro del Interior que ha colaborado desde el principio con la Justicia, ha sido el ministro Marlaska», dijo, eludiendo concretar más en la respuesta.
Pérez de los Cobos fue destituido cuando trascendió que un equipo a su cargo estaba realizando una investigación confidencial encargada por una jueza sobre miembros del Gobierno.
El primer informe que el instituto armado le hizo llegar a la jueza Rodríguez-Medel contenía algunos fallos e inexactitudes, como la fecha en la que la OMS declaró la pandemia, un aspecto que fue empleado por los partidarios del Gobierno para tratar de desacreditarlo por completo.
Informes sin «garantías»
Sánchez pareció abundar ayer en esta idea, cuando aseguró que le «gustaría que los informes de la Guardia Civil se elaboraran con garantías y confidencialidad», alimentando así una de las múltiples versiones de Marlaska para justificar el cese del coronel, la basada en la filtración del informe a los medios, que achaca a De los Cobos. De inmediato fue censurado por el PP, que a través de su secretario general, Teodoro García Egea, acusó a Sánchez de «presidir el Gobierno de la mentira y atacar a la Guardia Civil insinuando que sus informes no son rigurosos».
El jefe del Ejecutivo mostró su «confianza» en la Guardia Civil, tratando de desmarcarse de las declaraciones de su ministro de Consumo, Alberto Garzón, que señaló que en el cuerpo hay la presencia de algunos elementos «reaccionarios» dispuestos a asestar un golpe de Estad en cualquier momento. El secretario general socialista defendió que una mala praxis de un agente, no debiera afectar al conjunto: «Si algún elemento se aparta, solo se compromete a sí mismo, no a la institución, lo que ocurre en cualquier actividad», dijo.
Denuncia a María Gámez
Por otra parte, la Asociación de Consumidores y Usuarios José María Mena presentó ayer una denuncia contra la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, por un delito de prevaricación relacionado con el cese en el que cuestiona la llamada que esta hizo a De los Cobos argumentado que «la causa del 8-M era delicada para el Gobierno» y que por tanto quería conocer lo entregado a la jueza.