El Estado podrá rescatar empresas clave para la salud o la seguridad

Ana Balseiro
Ana Balseiro MADRID / LA VOZ

ACTUALIDAD

Pool

Da luz verde a un fondo de 10.000 millones para inyectarlos en compañías estratégicas

04 jul 2020 . Actualizado a las 09:38 h.

Pasados los peores momentos de la pandemia, donde la prioridad absoluta era contener el virus aunque eso exigiera hibernar la economía, el Ejecutivo se concentra ahora en minimizar el daño en el tejido productivo e impulsar la vuelta a la normalidad. A ello responde el nuevo decreto de medidas urgentes aprobado ayer en un Consejo de Ministros extraordinario, con el que se movilizan 50.000 millones en diferentes programas de apoyo a la reactivación económica y al empleo. En esa batería de medidas destaca la creación de un fondo de apoyo a la solvencia de empresas estratégicas, dotado inicialmente con 10.000 millones, por el que el Estado rescatará a compañías clave que atraviesan dificultades tras el covid-19.

¿Qué empresas se consideran estratégicas?

Según informó ayer el Ministerio de Hacienda, al que estará adscrito el fondo, está dirigido a sociedades no financieras -a diferencia de la crisis anterior, en la que el rescate se centró en la banca- que atraviesen «severas» dificultades «de carácter temporal» como consecuencia de la pandemia. Además, las empresas susceptibles de ser apoyadas deben ser «estratégicas» para el tejido productivo nacional o regional. En esta categoría se enmarcan las que sean claves por motivos como su «sensible impacto social y económico, su relevancia para la seguridad, la salud de las personas, las infraestructuras, las comunicaciones o su contribución al funcionamiento de los mercados».

¿Cómo se realizará ese rescate temporal?

El fondo permitirá que el Estado refuerce -eso sí, temporalmente, mientras persistan los problemas- la solvencia de las empresas a través de varios instrumentos. Así, en función del caso particular de cada compañía, podrá hacerlo mediante préstamos participativos, adquiriendo deuda subordinada o bien suscribiendo acciones u otros instrumentos de capital. Es decir, en ningún caso serán subvenciones, sino participaciones societarias mediante las fórmulas referidas.

El Ejecutivo subraya que el mecanismo está sujeto a lo dispuesto en la Ley de Régimen Jurídico del Sector Público y «se ajusta» a la normativa de ayudas de Estado de la Comisión Europea. «En concreto, se encuadra en el marco europeo de medidas de apoyo económico ante el covid-19», añade el ministerio, recordando que en mayo Bruselas modificó el marco temporal de las ayudas estatales frente a la pandemia para incluir las dirigidas a recapitalizar empresas no financieras en dificultades por el virus.

¿Hay que solicitarlo?

Sí. Serán las compañías interesadas las que deberán solicitar el acceso al fondo, que estará gestionado por un consejo rector a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). El Gobierno también apunta que el importe de los dividendos, intereses y plusvalías que resulten de las inversiones que se realicen en las citadas empresas pasará a ingresarse en el Tesoro Público. La pretensión es ir más allá y, según los trabajos de la comisión parlamentaria para la reconstrucción, prohibir que las empresas rescatadas repartan dividendos en dos años.

¿Cuáles serán las condiciones para acceder a este salvavidas?

Hacienda explicaba ayer que las corporaciones susceptibles de recibir ayuda tendrán que cumplir condiciones: además de las previstas en el marco temporal comunitario -en vigor desde abril y modificado el 8 de mayo-, «las que serán fijadas en próximas fechas por el Consejo de Ministros». Es decir, que aunque el fondo está creado, los requisitos para acceder a él aún se harán esperar.

Otros 40.000 millones en avales del ICO para impulsar nuevas inversiones

Tras el buen resultado de la primera línea de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) que, por un importe global de 100.000 millones, activó el Ejecutivo en los primeros compases de la crisis sanitaria para dar liquidez al tejido productivo, el Consejo de Ministros aprobó ayer una nueva remesa de garantías públicas para impulsar inversiones de autónomos y empresas.

Con una cuantía de 40.000 millones, su objetivo es respaldar la actividad para que «vuelva al crecimiento y la recuperación», según señaló Pedro Sánchez durante su intervención tras firmar con los agentes sociales el acuerdo por la reactivación económica y el empleo.

En concreto, la nueva línea de avales tiene como objetivo impulsar la inversión nueva en los ámbitos donde se generen «mayores efectos arrastre y valor añadido», en torno a dos ejes principalmente: la sostenibilidad medioambiental y la digitalización, según detalló el Ministerio de Economía.

Las características específicas de la línea de avales, el porcentaje de cobertura y la distribución por tramos se aprobarán en los Consejos de Ministros de las próximas semanas. Lo que sí vio ayer la luz fueron los planes de sostenibilidad turística en destinos, con el objetivo de incentivar los viajes a áreas rurales y de interior, así como una moratoria hipotecaria para inmuebles afectos a la actividad turística. Dispondrán de hasta 12 meses para las operaciones hipotecario suscritas con la banca.