El Reino Unido multará con 67 euros a aquellos padres que no envíen a sus hijos al colegio
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El primer ministro Boris Johnson ha calificado de «vital» que las clases presenciales se retomen en septiembre y aseguró que el regreso será seguro
24 ago 2020 . Actualizado a las 19:29 h.«Vital». Así han calificado desde el Gobierno británico el regreso de todos los estudiantes a sus aulas a partir del próximo mes de septiembre. Y para conseguir esto las autoridades han tratado de disipar los temores de los padres asegurando que el riesgo de contagio del covid-19 es «mínimo», al tiempo que avisan sobre las consecuencias físicas y mentales que para los niños y jóvenes representa seguir en sus casas. Por si estos argumentos anteriores no fueran suficientes, también han advertido a los representantes que serán multados si sus hijos no acuden a sus colegios.
«Vivimos en un país donde la educación es obligatoria (…) las multas por inasistencia son siempre el último recurso», afirmó este lunes el ministro de Escuelas, Nick Gibb, durante una entrevista en la BBC. En la actualidad, los padres en el Reino Unido pueden ser multados con 60 libras (66,50 euros) si sus hijos se ausentan reiterada e injustificadamente a sus clases. Esta sanción, que se puede elevar hasta 120 (133) si la misma no es pagada el lapso previsto, fue diseñada para disminuir la tentación de realizar viajes de vacaciones durante la época escolar.
El primer ministro Boris Johnson ha hecho de la vuelta al colegio una cuestión de honor, en especial tras el escándalo de la selectividad de días pasados. Por ello, ayer, en un mensaje difundido a través de su cuenta de Twitter, urgió a los padres a enviar a los estudiantes a sus centros.
«Entiendo que hay personas preocupadas, pero el riesgo de contagio es muy, muy, pero que muy pequeño y el riesgo de que los niños se enfermen severamente es aún más pequeño», dijo, coincidiendo con el inicio de las clases en Irlanda del Norte, donde se han reportado dos nuevos decesos por covid-19. Desde el 10 de Downing Street aseguraron que, si los rebrotes se salieran de control, el curso volvería a ser a distancia, como ocurrió entre marzo y junio.