Sánchez se abre a estudiar la propuesta de Casado para crear una agencia independiente que reparta los fondos europeos

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

ACTUALIDAD

Pedro Sánchez y Pablo Casado en la Moncloa, en una imagen de archivo
Pedro Sánchez y Pablo Casado en la Moncloa, en una imagen de archivo Fernando Villar | Efe

El líder de la oposición descarta apoyar los Presupuestos y la renovación de las instituciones que reclama el Gobierno

02 sep 2020 . Actualizado a las 19:03 h.

Pedro Sánchez y Pablo Casado llevaban cuatro meses sin hablar, por lo que fueron muchos y muy variados los temas que trataron en su reunión de este miércoles en la Moncloa. Dos horas en las que, según trasladó el líder de la oposición al finalizar el encuentro, destinaron a «analizar la difícil situación por la que atraviesa España».

Entre las principales novedades destaca la propuesta del presidente del PP para la creación de una agencia nacional para la recuperación económica de España, un alto comisionado independiente para evitar «la discrecionalidad, el clientelismo y el peronismo» del Gobierno a la hora de repartir la bolsa de ayudas procedente de Bruselas destinada a paliar los efectos del coronavirus, estimada en 140.000 millones. Casado propuso que este «órgano independiente» debería estar presidido por alguien sin «adscripción partidista», sugiriendo la idoneidad para el cargo de alguno de los ex gobernadores del Banco de España. Estaría al frente de un equipo conformado por una mezcla de personal público y privado.

Con este ente se facilitaría sacar el reparto de fondos «de la confrontación política», al tiempo que se dotaría de «plurianualidad», afirmó Casado. Entre sus principales ventajas, argumentó, podrán participar las comunidades autónomas y las entidades municipales, y, debido a esa plurianualidad, los remanentes que quedaran sin ejecutar podrían pasar al siguiente ejercicio.

Casado puso sobre la mesa impulsar una ley de urgencia en el Parlamento que permita la creación de este organismo con la mayor rapidez posible. «Si lo vota el PP, ya somos 200 diputados. Esa es la fortaleza que requiere el Gobierno de España», afirmó. Según el jefe de la oposición, Sánchez le trasladó que «está dispuesto a estudiarlo».

«La pelota está en el tejado de Sánchez»

En contra de lo que viene sosteniendo el Gobierno sobre la necesidad de tener aprobado un nuevo Presupuesto para poder administrar las ayudas europeas, tratando de presionar así al PP en busca de su apoyo, Casado afirma que no es indispensable tener otras cuentas públicas para disponer de estos fondos. «La pelota está en el tejado de Sánchez», aseveró, volviendo a descartar el respaldo de la bancada popular al proyecto presupuestario. Expuso varias razones para justificar esta negativa. En primer lugar, porque las desconoce: «No me ha contado nada, no conozco una sola línea; para nosotros no puede ser un trágala», dijo. Por otra parte, porque el PP «es la oposición y lidera la alternativa», y finalmente porque existen otros caminos para alcanzar los 176 diputados que requiere el Ejecutivo, una suma para la que «no son necesarios ni Bildu, ni Junts, ni el PDECat ni ERC», en la que el PSOE y Podemos deberían llegar a un acuerdo con Cs, el PNV y otras formaciones minoritarias en el Parlamento. «Ciudadanos no tiene problemas en que haya un partido condenado por financiación irregular», deslizó, en clara referencia a Podemos, lamentando que la formación naranja empleó otro rasero cuando algunos miembros del PP fueron llamados a declarar. 

Entre los temas en los que la colaboración entre el Gobierno y el PP se antoja imposible también está la renovación de ciertas instituciones que necesitan el apoyo de una mayoría reforzada en el Parlamento, entre los que destacan el Consejo General del Poder Judicial, el Defensor del Pueblo o el consejo de administración de RTVE. «En dos años el PSOE no ha contado con el PP», lamentó Casado. Ni para «nombrar a la fiscala general del estado, ni para nombrar a Pablo Iglesias en la comisión del CNI... El problema lo tienen ellos». 

Las conversaciones sobre los Presupuestos y la renovación de estas instituciones siguen bloqueadas, pero Casado afirmó que sí está dispuesto a explorar la colaboración en otras materias. «Yo no soy el del no es no, yo como mucho soy el del a veces sí, no», defendió. 

«Horizonte de colaboración»

El «horizonte de colaboración» se vislumbra en el «fortalecimiento del marco legal» para disponer de una mayor garantía jurídica a la hora de combatir determinadas medidas sobre el coronavirus, una reforma que ya plantea el Gobierno para evitar que un juzgado de primera instancia pueda tumbar ciertas disposiciones para contener la pandemia. 

En donde Sánchez encontrará la plena colaboración del PP es a la hora de alcanzar un gran pacto de Estado por la Sanidad. «No tenemos excusa para no encerrarnos y legar a nuestras generaciones futuras un acuerdo en sanidad fuera de la confrontación partidista y que dure». Por otra parte, Sánchez y Casado también acordaron relanzar el Pacto de Toledo, «para nosotros los pensionistas son lo primero», afirmó, así como para la sostenibilidad y la digitalización del país. 

En lo relativo a la pandemia, Casado criticó los malos datos de esta segunda oleada del virus, el oscurantismo en las cifras aportadas por el Gobierno. En el plano económico, lamentó las últimas cifras del paro. «Casi siete millones de españoles que quieren trabajar y no pueden».

El Gobierno sale a la carga contra Casado: «Sigue instalado en el no es no»

Montero acusa al jefe de la oposición de bloquear las instituciones y de intentar aprovecharse electoralmente de la pandemia

Moncloa salió a la carga contra Pablo Casado a la conclusión del encuentro que mantuvieron este miércoles el presidente del Gobierno y el jefe de la oposición. La portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, aseguró que el presidente del PP «sigue instalado en el frentismo, en la confrontación y en el no es no».

Según argumentó la ministra de Hacienda, Sánchez convocó esta reunión para bordar tres puntos fundamentales. En primer lugar, la despolitización de la pandemia: «Lamentablemente, el presidente del PP seguirá utilizándola exclusivamente con intereses», lamentó. «La situación sanitaria requiere del concurso de todos».

En segundo lugar, la renovación de las instituciones como el Consejo General del Poder Judicial, el Defensor del Pueblo o la dirección de RTVE, unos cambios que exigen una mayoría reforzada en el Congreso y, por tanto, la colaboración del PP. También ha dicho que no. Llama la atención que un partido que se envuelve en la bandera con golpes en el pecho haga un enfrentamiento a la Constitución española evitando cumplir con el mandato», criticó Montero. Y por último, el proyecto presupuestario que permita jubilar las cuentas públicas del 2018, a la que «también ha dicho que no».

«Hemos encontrado al mismo Casado de hace dos años, a la persona que permanente dice que está dando un giro al centro, pero parece que gira sobre sí mismo y que nunca sale de la espiral», dijo Montero.