Pedro Sánchez vincula el refuerzo de la sanidad y la educación a una subida de impuestos
07 sep 2020 . Actualizado a las 20:10 h.Presión fiscal débil, sistema con deficiencias redistributivas y un desplome histórico de los ingresos. Son los ingredientes del cóctel que podría conducir al Estado español a un problema grave de financiación para sufragar una salida simétrica de la crisis. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lo reconoció esta mañana durante una entrevista en TVE, recogida por Europa Press: «Hay un problema importante de recaudación de impuestos» para poder afrontar la «inversión más fuerte» que requieren partidas como la sanidad, ciencia y la educación. «Es un hecho», admitió Sánchez, recordando que España es uno de los países con menos presión fiscal (35,4 % del PIB) de la UE (40,3 % del PIB).
Desplome económico
En un contexto de crisis como el heredado por la pandemia se esperan profundas caídas del producto interior bruto (PIB) para este año: «La pandemia hace que el PIB vaya a caer este año como no ha caído en muchísimos años, al menos un 10% tenemos previsto», señaló Sánchez para tratar de explicar que la combinación de la baja presión fiscal y la caída de los ingresos derivados de la recesión podrían dejar esquilmado al Estado de bienestar. Por eso defendió la necesidad de acometer una reforma fiscal integral al tiempo que apuntalan la protección de las familias más vulnerables, «sin dejar a nadie atrás».
¿Hacia dónde se dirigirán los cambios? Sánchez no quiso dar detalles aunque cuenta con las recomendaciones del Banco de España, la AIReF y Gestha. El sindicato de los técnicos de Hacienda insiste en que «es más necesaria que nunca una reforma fiscal integral» y que hay margen para subir el IRPF a las rentas más altas. También está en el punto de mira el impuesto de sociedades, con una recaudación del 2,5 % del PIB, en contraste con el 2,7 % de media de la UE. Aunque sin duda, donde más curvas de avecinan es en el IVA. La AIReF cree que los tramos reducido (10 %) y superreducido (4 %) no son eficientes a nivel redistributivo. En el mes de julio reveló que el 62 % del beneficio de estos tramos del IVA se concentra en las clases medias y altas, por eso instó al Gobierno a subir el impuesto en estos tramos cuando el país enfile la recuperación.
Sánchez dice que la fusión de CaixaBank y Bankia será «positiva para la economía y española»
Sobre la posible fusión de CaixaBank y Bankia, el presidente del Gobierno considera que es una operación con varios aspectos «muy positivos», entre los que ha citado la cohesión territorial. Sánchez ha considerado así que, tanto «desde el punto de vista financiero como el territorial», esta operación tiene «buenos mimbres» de que será «positiva para la economía española». Ha recordado que el Estado tiene que ver las condiciones de esta fusión, pero considera que es positiva porque puede ayudar al propio interés general, a la estabilidad del sector financiero y a maximizar la participación pública.
El jefe del Ejecutivo ha valorado que la entidad resultante de la fusión sería el primer banco español y décimo de Europa, algo muy bueno «desde el punto vista de la dimensión», un aspecto en el que el sector financiero español tiene que dar «pasos adelante». Igualmente, ha puesto en valor la «cohesión territorial» que conllevaría porque implicaría un banco con presencia muy importante en Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana y Baleares. Tras recordar que la operación ya está siendo muy bien vista por los mercados como lo demuestra el hecho de que el valor de Bankia ha aumentado el 33 por ciento desde que se conoce la noticia, Sánchez ha defendido la confidencialidad que se ha mantenido sobre esta cuestión.
Al ser preguntado por el malestar en su socio de Gobierno, Unidas Podemos, porque desconocía la posible fusión, Sánchez ha señalado que se ha dado a conocer cuando las dos entidades, ambas cotizadas, han decidido iniciar el proceso de negociación. «Lógicamente quienes la sabían son los responsables de economía del Gobierno; tenemos que garantizar esa confidencialidad y ser muy conscientes de que el proceso no ha terminado», ha concluido.
Delito de sedición
Por otra parte Sánchez ha confirmado que mantiene su compromiso de reformar el Código Penal para rebajar el delito de sedición, que afectaría a los políticos catalanes presos por el procés, y ha pedido ser «empáticos y sensibles» con la «ruptura emocional» que esta situación supone para «parte de la sociedad catalana».
El jefe del Ejecutivo ha defendido que es necesario sacar «muchas lecciones» de lo que ha ocurrido con el «mal llamado procés» y «con la situación de líderes que están en la cárcel», y no solo «desde el punto de vista del incumplimiento legal» sino «desde la ruptura emocional que está representando para parte de la sociedad catalana».
«El objetivo que tiene este Gobierno es que se mantiene nuestro compromiso de actualizar, modernizar y revisar, vía modificación del Código Penal, estos delitos. Es un compromiso de investidura y se va a mantener», ha reafirmado.
