El PP vincula a la vicepresidenta Ribera con «una trama corrupta» en la empresa Isofotón
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La titular de Transición Ecológica lo niega: «Jamás tuve poderes ni firma»
14 oct 2020 . Actualizado a las 11:53 h.El PP ha acusado este miércoles en el Congreso a la vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, de estar «salpicada por una trama corrupta» en la empresa Isofotón, acusaciones ante las que Ribera ha asegurado que «ha pinchado hueso»: «Ni tuve poderes ni tuve firma jamás en esa compañía», ha asegurado.
En la sesión de control al Gobierno en la Cámara Baja, el diputado popular Juan Diego Requena ha asegurado que la vicepresidenta cuarta del Gobierno es «protagonista de una puerta giratoria vergonzosa» que «ha costado 80 millones de dinero público para que trabajara» en esta compañía, señalando que, «solo un mes después del último regalo socialista» de la Junta de Andalucía a esta compañía, Ribera comenzó a trabajar en esta firma.
El diputado del PP ha relacionado el «desfalco socialista de los ERE y el robo a los parados andaluces» con un «complot de la agencia Idea para regar de millones de manera irregular a Isofotón». «Para presumir de ser tan cristalina, es bastante opaca. ¿Por qué ha quitado del Portal de Transparencia su experiencia en Isofotón? ¿Qué oculta?», le ha preguntado.
Teresa Ribera trabajó como directiva en esta empresa, dedicada a la producción e instalación de paneles solares y que está investigada judicialmente tras recibir préstamos que no pudo devolver tras recibir avales de la Agencia pública de la Junta Andalucía IDEA.
«Ha pinchado en hueso»
Ribera ha replicado en su respuesta que, con esta pregunta, Requena busca llevarle «al lodazal» y «al barro», pero que «ha pinchado en hueso»: «No tuve nada que ver ni con la financiación de Isofotón, ni antes ni durante ni después, ni con las cuentas ni las decisiones de inversión. Ni tuve poderes ni tuve firma jamás en esa compañía», ha subrayado.
Así, la vicepresidenta para la Transición Ecológica ha asegurado que llegó a «una compañía emblemática» para tratar de «acompañarla» a su internacionalización «en un momento crítico». «Visto que aquello no era posible, me marché», ha zanjado.
Sin embargo, ha señalado que esa experiencia le sirvió para constatar los problemas de las pymes industriales para crecer o internacionalizarse, la falta de apoyo institucional y el éxodo de sus trabajadores ante el cierre de las empresas.
Así, ha relatado cómo, entre el 2009 y el 2013, un 60 % de trabajadores del sector fotovoltaico perdió su trabajo, y hasta el 2014, de las 41 empresas que había cinco años atrás, 36 tuvieron que echar el cierre. «Más política industrial, más política de acompañamiento a pymes y ver cómo recuperar y ayudar a la recuperación de este país, en lugar de embarrar, que es donde están ustedes», ha espetado Ribera a la bancada popular.