El «desafío humano»: Reino Unido planea infectar a voluntarios con covid-19 para probar vacunas

juan francisco alonso LONDRES / E. LA VOZ

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WILL OLIVER | efe

Se espera que las pruebas, auspiciadas por el Gobierno, empiecen en enero próximo

20 oct 2020 . Actualizado a las 17:10 h.

El Reino Unido planea un estudio para conocer la efectividad de vacunas contra el covid-19 en el que se infectaría deliberadamente con el virus, en un entorno controlado, a voluntarios inmunizados, indicaron este martes fuentes oficiales. Se espera que las pruebas, conocidas como de «desafío humano» y auspiciadas por el Gobierno, empiecen en enero próximo, y que en ellas participen 90 voluntarios sanos de entre 18 y 30 años, a los que se les suministrará previamente una vacuna candidata.

En la carrera para hallar una vacuna contra el covid-19 el Reino Unido parece estar a la cabeza y prueba de ello es que Londres se está preparando para probar posibles curas contra el coronavirus en seres humanos. Ayer el Gobierno de Boris Johnson anunció que estaba a la caza de unos 90 voluntarios, de entre 18 y 30 años de edad, a los cuales les inoculará el patógeno y posteriormente se les suministrará los remedios que distintos equipos de investigación han venido desarrollando aceleradamente en los últimos meses.

Tras informar que han previsto unos 33,6 millones de libras (37 millones de euros) en el llamado Human Challenge study (el estudio del desafío humano), el ministro de Comercio, Alok Sharma, explicó que quienes se presenten para el experimento deberán permanecer durante dos semanas y media recluidos en una unidad del Royal Free, hospital ubicado al norte de la capital británica, para que los científicos puedan ver si la vacuna funciona y sus potenciales efectos secundarios.

Los ensayos, que serán dirigidos por el Imperial College London y por la sanidad pública (NHS, por sus siglas en inglés), se iniciarán previsiblemente en enero, según apuntó Sharma, que agregó que: «El Gobierno hace todo lo que puede por combatir el coronavirus, incluso con el apoyo a nuestros mejores y más brillantes científicos e investigadores en su búsqueda por una vacuna que sea segura y efectiva».

Sobre los ensayos

Las pruebas buscarán establecer cuál es la mínima dosis del virus necesaria para causar una infección del covid-19 en hasta 90 voluntarios blancos, que no padezcan de enfermedades coronarias, diabetes, obesidad u otras condiciones preexistentes que los coloquen en mayor riesgo. Los voluntarios serán vigilados las 24 horas del día por médicos y científicos para ver cómo reaccionan a la enfermedad y a los remedios hasta ahora desarrollados. «No estamos tratando de enfermar a estos sujetos. De hecho, todo lo contrario. Estamos tratando de conseguir que tengan el suficiente virus para que lo podamos detectar», afirmó Andrew Catchpole, director científico de hVivo, unos laboratorios privados que participan en el proyecto.

Pese a que reconoció que este tipo de pruebas no están libres de riesgos, el doctor Chris Chiu, del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Imperial College, aseguró que están tomando todas las medidas necesarias para reducir los peligros a la mínima expresión y defendió la urgencia de los mismos. «Esta investigación nos permitirá entender mejor cómo se comporta el coronavirus, su biología, los signos que muestra en una persona que está protegida y los que muestra una que está desarrollando la infección», apuntó.

A la caza de los voluntarios

En las últimas semanas el Imperial College y otras instituciones han enviado cartas a los ciudadanos británicos para participar en este y otros estudios para desarrollar tratamientos contra el covid-19. La Voz de Galicia pudo hablar con Rana Miah, un londinense, que hace unos días recibió una de esas invitaciones y descartó participar. «No quiero ser un conejillo de indias», replicó. Este tipo de ensayos con seres humanos se vienen realizando en el país desde finales del siglo XIX, cuando el médico inglés Edward Jenner inoculó a un joven el virus de la viruela y luego lo expuso a la enfermedad, para producir la primera vacuna del mundo. Desde ese momento este modelo se ha empleado para desarrollar las vacunas contra la fiebre tifoidea, el paludismo y otras dolencias.

Hay más de cien vacunas contraer el covid-19 en desarrollo en el mundo y algunas están muy avanzadas, entre ellas la de la Universidad inglesa de Oxford y la farmacéutica AstraZeneca. «Para las vacunas que están en las etapas finales de desarrollo y ya han demostrado ser seguras y efectivas en los estudios de fase 3 (los últimos), los estudios de 'desafío humano' pueden ayudar a entender más si las vacunas previenen la transmisión», señaló el subdirector médico del Gobierno, Jonathan Van-Tam.