El Gobierno de coalición acusa al CGPJ de «invadir la soberanía del poder legislativo»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ACTUALIDAD

La vicepresidenta primera del Gobeirno, Carmen Calvo, este viernes durante la inauguración de la mesa redonda por el 42 aniversario de la reforma de la Ley de peligrosidad y rehabilitación social
La vicepresidenta primera del Gobeirno, Carmen Calvo, este viernes durante la inauguración de la mesa redonda por el 42 aniversario de la reforma de la Ley de peligrosidad y rehabilitación social EDUARDO PARRA

El intento de limitar los poderes del Consejo General del Poder Judicial cuando esté en funciones genera un conflicto institucional sin precedentes

19 dic 2020 . Actualizado a las 09:28 h.

La tensión entre el Gobierno y la cúpula del poder judicial a costa de la reforma impulsada por el Ejecutivo para limitar sus funciones en tanto no se renueve su mandato va en aumento. La decisión del Consejo General del Poder Judicial de proceder, estando en funciones, al nombramiento de magistrados mientras el Congreso tramita una reforma que pretende impedirlo, y la aprobación de un comunicado en el que el consejo reclama que se escuche su opinión antes de reformar la ley, provocó una dura respuesta por parte del Ejecutivo que supone un conflicto sin precedentes entre el poder ejecutivo y el judicial.

«Ningún poder puede invadir la soberanía parlamentaria», afirmó la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, mostrando así el gran enfado de Moncloa ante el desafío de una parte mayoritaria de los magistrados del CGPJ. «La independencia de los tres poderes del Estado, el Judicial, el Legislativo y el Ejecutivo, es de ida y vuelta. Es decir, la tenemos que cumplir todos», insistió Calvo.

 Campo intentó frenar a Lesmes

En el Gobierno no esperaban una resistencia tan explícita como la que se ha producido en la cúpula judicial ante su intento de solventar el bloqueo en la renovación del CGPJ por la negativa del PP a pactar con Podemos modificando la ley y amenazando con reformar el propio sistema de elección de los vocales del consejo. Y, por ello, la número dos del Ejecutivo calificó de «insólito» el pronunciamiento de los jueces. El sometimiento de ese texto, en el que el pedían ser escuchados, a la votación de la mayoría del consejo, ya había sido anunciado previamente. Y, ante ello, el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, se movilizó para tratar de desactivar la maniobra. El miércoles pasado, el ministro llamó personalmente el presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, para transmitirle un mensaje de preocupación y señalarle que lo correcto es que «cada cual se mantenga en su sitio».

 La democracia «en solfa»

La relación con Lesmes era ya muy tirante a pesar de que la decisión de proceder a cubrir vacantes de altos cargos de la judicatura estando caducado su mandato se tomó con apoyo de miembros progresistas del consejo designados por el PSOE.

Pero Calvo fue ayer más lejos que nunca en sus criticas. «Si el Parlamento decide regular este asunto, lo mejor es que cada uno esté en su sitio expectante. Imagínese que cualquier otro órgano decide que cuando el Parlamento va a legislar ellos tienen que ser escuchados», dijo Calvo, que acusó al consejo de poner «en solfa» la «democracia representativa».

La tesis del Gobierno es que la reforma que plantea para limitar los poderes del CGPJ en funciones no constituye una intromisión en su ámbito competencial, sino que se trata simplemente de equiparar las limitaciones del poder judicial cuando su mandato está caducado a las que ya se imponen al poder ejecutivo y al legislativo cuando se encuentran en funciones, dado que en ese período el Gobierno no puede tomar decisiones que no sean urgentes y el Parlamento se limita a la Diputación Permanente.

El ministro Juan Carlos Campo asegura a los jueces que el pacto con el PP ya está cerrado

 EUROPA PRESS

El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, insistió este viernes, en una reunión con las asociaciones judiciales, en que el acuerdo con el PP para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ya está cerrado, asegurando que solo falta que los populares accedan a hacerlo público. Así se lo trasladó Campo a la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), la Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV), el Foro Judicial Independiente (FJI) y Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD), según fuentes jurídicas citadas por Europa Press. La reunión giró en torno a la situación de parálisis en el CGPJ, a las deficiencias del sistema de nombramiento de los doce vocales del turno judicial y al deterioro de la imagen del Poder Judicial a ojos de la ciudadanía.

El ministro aseguró a las asociaciones que tanto la proposición de ley que busca impedir que un CGPJ en funciones pueda realizar nombramientos discrecionales en puestos clave de la cúpula judicial como la anterior -que planteaba cambiar a mayoría absoluta la mayoría de tres quintos por la que se elige a esos doce vocales, y que permanece congelada en el Congreso- son una alternativa al bloqueo impuesto por el PP para renovar el órgano de gobierno de los jueces. De hecho, Campo se mostró partidario de que cualquier reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) se lleve a cabo con «sosiego».