Libre con cargos el detenido por contratar a unos sicarios para matar a su expareja

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

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GUARDIA CIVIL

El sospechoso, vecino de Pontevedra, contactó con los asesinos a sueldo, que en realidad eran estafadores, a través de la Internet profunda

26 dic 2020 . Actualizado a las 10:12 h.

El vecino de Pontevedra detenido por la Guardia Civil por supuestamente contratar a unos sicarios para acabar con la vida de su expareja ha quedado en libertad con cargos. El sospechoso, según precisaron desde la Comandancia de Pontevedra, había sido puesto a disposición judicial en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número uno de Caldas.

Las informaciones facilitadas por el instituto armado señalan que esta persona se valió de la deep web o Internet profunda para contratar a unos sicarios para que asesinasen a su expareja. Así es lo que sostienen los investigadores de la Guardia Civil que arrestaron a este individuo tras una investigación cuyo origen fue un reportaje periodístico de una medio de comunicación del Reino Unido. Los autores del mismo, que investigaban la proliferación de estafas a través de la deep web, se pusieron en contacto el pasado noviembre con las autoridades españolas para comunicar que disponían de una información sensible relacionada con la provincia de Pontevedra.

 Del caso se hizo cargo la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de Pontevedra, en colaboración el Grupo de Delitos Telemáticos de la Unidad Técnica de Policía Judicial (UTPJ Madrid). Los datos de que se disponía es que, a través de un nick anónimo, se habían adelantado quince mil euros, en bitcoins, a un grupo de presuntos sicarios, a los que habían facilitado toda clase de datos personales de una mujer -domicilio, lugar de trabajo, matrícula del coche, rutinas diarias e, incluso, una fotografía-, al tiempo que les encargaba que acabasen con su vida simulando un accidente.

Fue el comienzo de la operación Hitman Gallego, una denominación que hace referencia a la denominación anglosajona de los asesinos profesionales, pero también al popular protagonista de una saga de videojuegos que fue trasladada al cine. En un período relativamente breve de tiempo las pesquisas del Grupo de Homicidios y el EDITE (Equipo de Investigación Tecnológica) del instituto armado «no solo permitieron constatar la identidad de la víctima potencial, sino también localizar a la persona que había contratado los servicios de los sicarios».

Los agentes verificaron que este último había mantenido una relación sentimental con la primera hace unos cuatro años aproximadamente. Desde la Comandancia de Pontevedra remarcaron que, precisamente, «esta circunstancia es determinante para que los hechos investigados se puedan enmarcar también en el ámbito delictivo de la violencia de género».

Estafa de los supuestos sicarios

Lo que el pontevedrés desconocía es que los supuestos sicarios con los que había contactado eran realmente un grupo de estafadores que, según la Guardia Civil, «en ningún momento pensaban concluir con el encargo realizado, sino solamente cobrar» el dinero que les habían adelantado.

En todo caso, desde el instituto armado remarcaron que en la deep web la mayoría de los sitios web están asociados con actividades ilegales, y por ello muchas personas lo utilizan de forma ilícita. Y es que es relativamente sencillo anonimizar los datos de conexión y de navegación mientras se buscan servicios relativos al tráfico de armas, venta de órganos, trata de seres humanos...

De hecho, también se podrían contratar mercenarios, sicarios y asesinos a sueldo a cambio de un precio considerable. «Uno de los aspectos más importantes como en todo servicio contratado es el de las condiciones de pago, y el problema al que se enfrentan todos los interesados siempre es el mismo: cómo evitar las frecuentes estafas y asegurarse de que el delito se ha consumado», apuntaron desde la Guardia Civil0.

Y es que no hay que perder de vista que se está tratando con delincuentes, por lo que es relativamente frecuente que sea un timador quien esté ofreciendo un servicio falso. Y dados los propios condicionantes de lo que se pretende contratar, la víctima del estafador no pueden reclamar nada, ni interponer denuncia alguna porque se estarían autoinculpando de un delito más grave.

En cuanto a los pagos, la moneda utilizada generalmente en este tipo de operaciones es una criptomoneda, toda vez que se trata de una divisa electrónica descentralizada que puede transferirse electrónicamente entre dispositivos inteligentes, en teoría, sin dejar rastro. Y se dice «en teoría» porque se ha demostrado en numerosos casos que se ha podido se identificar al titular del pago.