Una de las enfermeras que administraron las primeras vacunas en una residencia de Lérida da positivo

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Milagros García, de 79 años, fue la primera residente del centro de mayores Balàfia I de Lérida en recibir la vacuna
Milagros García, de 79 años, fue la primera residente del centro de mayores Balàfia I de Lérida en recibir la vacuna ALBERT GEA | reuters

Los 66 usuarios del centro permanecen aislados en sus habitaciones

30 dic 2020 . Actualizado a las 09:14 h.

Una de las enfermeras del equipo sanitario encargado de administrar las primeras vacunas contra el coronavirus el pasado domingo, día 27, en la residencia Balàfia I de Lérida ha dado positivo, confirmaron este martes desde el Departamento de Salud de la Generalitat a Efe. A raíz de este resultado, se ha decidido aislar a los 66 residentes en sus habitaciones, 61 de los cuales ya han recibido la inyección. Sin embargo, ninguno de los 78 trabajadores del centro (17 vacunados el domingo) debe permanecer en cuarentena al no ser considerados contactos estrechos con la profesional, una externa que acudió solo ese día excepcionalmente para hacer esta labor.

Salud ha explicado que los equipos de vacunación están formados por personal externo a las residencias, que funcionan de manera autónoma y que tan solo se desplazan durante las horas que dura la campaña. Así, se han aislado también otras cuatro enfermeras más que acudieron al mismo centro y que, en este caso, sí que se consideran contactos estrechos con la profesional positiva.

A lo largo de este martes se han practicado pruebas PCR a internos y trabajadores de la residencia de Balàfia y, a la espera de los resultados, el día 31 se repetirán los test. Además, una trabajadora fija del centro, que llevaba días sin acudir a su puesto de trabajo por presentar síntomas, también ha dado positivo. Desde Salud aseguran que los casos «no tienen relación entre sí» y sostienen que durante el primer día de vacunación en Lérida se siguieron todas las medidas de precaución establecidas de forma correcta.

Milagros García, de 79 años de edad, fue la primera residente del centro Balàfia I en recibirla.