Los cuatro grandes retos que encara el Gobierno de coalición para el 2021

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID / LA VOZ

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Pedro Sánchez, durante la presentación del informe sobre el cumplimiento de los objetivos del Gobierno
Pedro Sánchez, durante la presentación del informe sobre el cumplimiento de los objetivos del Gobierno CHEMA MOYA

Sánchez busca ministro para liderar la peor crisis sanitaria de los últimos cien años

02 ene 2021 . Actualizado a las 12:36 h.

El Gobierno de coalición encara su segundo año de legislatura con varios retos que pondrán a prueba no solo la unión entre sus dos socios, el PSOE y Unidas Podemos, sino la fiabilidad de sus aliados parlamentarios, a los que seguirán necesitando para convalidar las leyes que salgan del Consejo de Ministros.

el coronavirus

La triple vertiente del covid-19. El desafío más inmediato y el que ocupa gran parte de las fuerzas del Ejecutivo. Pese a que la gestión sanitaria de la segunda oleada de la crisis fue derivada a los presidentes autonómicos, la elección del actual ministro de Sanidad, Salvador Illa, como candidato del PSC a las elecciones catalanas de mediados de febrero parece una apuesta muy arriesgada. Sánchez se queda sin el ministro de Sanidad en medio de la que, según sus propias palabras, es la peor crisis sanitaria de los últimos cien años. Y además, se queda sin su ministro por una razón electoral, al considerar que es el mejor candidato para disputar la batalla por la Generalitat. La crisis originada por el covid-19 presenta al menos otras dos vertientes que suponen otros dos retos mayúsculos para el Ejecutivo: la económica, con unos indicadores que solo invitan a pensar de manera pesimista, y la social, en donde el Gobierno tendrá que demostrar en una situación económica adversa que, tal y como garantizaron, no dejarán «a nadie atrás».

Rebajar disputas

Mantenerse unidos. Se trata de otro de los grandes desafíos del Gobierno para el 2021. Las diferencias entre el PSOE y Podemos comenzaron a aflorar casi desde el mismo instante en el que Sánchez e Iglesias firmaron su preacuerdo de coalición. En ocasiones han sido tenues roces, propios de las diferentes sensibilidades que están representadas en el Ejecutivo, pero otras veces han sido choques directos entre algunos de sus ministros o vicepresidentes. A finales de año, las grietas se han acentuado, y todo parece indicar que a medida que se vayan acercando las elecciones, las disputas serán más habituales. El objetivo del Gobierno pasa por chocar poco. Al menos, por aparentarlo de cara a la opinión pública.

El desafío catalán

Secesionismo. «Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí». El coronavirus hizo que el resto de cuestiones de la agenda, como el desafío secesionista en Cataluña, pasaran a un segundo o tercer plano, pero eso no significa que desaparecieran, tal y como sintetiza este breve relato de Augusto Monterroso. Sánchez tendrá que lidiar con los independentistas, con los que tiene pendiente volver a poner en marcha la llamada mesa de diálogo que acordó con ERC para su investidura. El secesionismo continúa reclamando la celebración de un referendo. Por otra parte, a la vuelta de la esquina también está la cuestión de los indultos. Habrá un antes y un después de las elecciones catalanas.

papel de la corona

Reforma peliaguda. En su última intervención del año, Sánchez abrió la puerta a aprobar una ley que contribuya a modernizar la Casa Real. La Corona, atacada por Podemos, es uno de los puntos que suscita mayores controversias dentro de la coalición y no parece probable que el PSOE logre encontrar apoyos en sus aliados habituales, por lo que necesitará del apoyo del Grupo Popular, que ya mostró su intención de respaldar solo una reforma que refuerce el papel de la monarquía dentro del Estado.

otros asuntos pendientes

Renovaciones y cuentas. Quedó pendiente la renovación del CGPJ, del Consejo de RTVE o del Defensor del Pueblo, para las que necesita al PP. Y aunque suene prematuro, otro reto será aprobar unos Presupuestos para el 2022, evitando evidenciar la debilidad parlamentaria de la coalición mediante prórrogas.