La inmunidad en España tardaría más de siete años a este ritmo de vacunación

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado REDACCIÓN / LA VOZ

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Una enfermera del Hospital San Pau de Barcelona prepara una vacuna de Pfizer
Una enfermera del Hospital San Pau de Barcelona prepara una vacuna de Pfizer Marta Pérez

La campaña «no se notará en los contagios hasta finales de febrero o marzo»

12 ene 2021 . Actualizado a las 22:00 h.

España ha administrado en estas dos semanas que van de campaña de vacunación contra el covid 406.091 dosis del preparado de Pfizer, que es el único disponible a la espera de que empiecen a llegar los viales de Moderna en los próximos días. Esto son, de media, unas 25.000 diarias, con lo que, si el ritmo no se incrementa, y además de manera exponencial, harían falta nada menos que 2.610 días, o sea 7 años y 2 meses, para vacunar al 70 % de los algo más de 47 millones de habitantes que tiene el país. Un objetivo que el Gobierno se ha fijado para finales del verano. Se necesita administrar más de 66 millones de dosis, con lo que España, a través de la Unión Europea, ya ha comprado en estos momentos producto más que suficiente para llegar a esas cifras, pero cuestión bien distinta es cuándo lo va a recibir, porque ahí los plazos sí que no encajan para nada. Se hace, por tanto, imprescindible que empiecen a aprobarse y distribuirse las vacunas de las otras cinco farmacéuticas -al margen de Pfizer y Moderna-, con las que la UE ha firmado contratos. La más próxima es la Oxford y AstraZeneca, sobre cuya autorización tiene previsto pronunciarse la Agencia Europea del Medicamento a finales de este mes y de la que España ha reservado 31,5 millones de dosis.

Incluso para llegar a esa «parte sustancial de la población» vacunada «entre mayo y junio», como anunció el ministro de Sanidad, hace falta un incremento radical de capacidades, porque a este paso se tardaría más de cuatro años en alcanzar esos 20 millones de personas inmunizadas.

Por poner un poco en contexto cómo va la evolución de la campaña en España, que no es muy diferente de lo que ocurre en el resto de los principales integrantes de la UE, cabe destacar que Israel, el país de referencia ahora mismo en el mundo por su efectividad, administra unas 80.000 dosis diarias, con jornadas de más de 150.000 y una previsión de llegar a las 170.000 en los próximos días, ahora que ya están con la inoculación de la segunda dosis a las primeras personas, entre ellas el presidente, que está en plena campaña electoral.

En cualquier caso, y a pesar de los datos de aplicación muy deficientes que presentan algunas comunidades -como Madrid, sobre todo-, nada hace pensar que el principal problema para lograr la inmunidad contra el covid-19 en España vaya a ser la capacidad para poner vacunas. Lo que verdaderamente va a determinar el éxito o el fracaso es la adquisición o no de producto suficiente.

Hasta el momento España tiene asegurados los primeros 30 millones de dosis de Pfizer y otros 20 adicionales, con posibilidad de ampliarlos 10 más, que acaba de firmar con la misma compañía. Le corresponden también 16 millones de la vacuna de Moderna, que está previsto que empiecen a llegar estos días. El problema es que, de todo eso, solo está comprometida la entrega de 4,5 millones de dosis de Pfizer en tres meses (que se ampliarían en otros 7,5 con la segunda compra) y 600.000 de Moderna en seis semanas. En otras palabras, el país necesita 1,5 millones de dosis a la semana para cumplir los objetivos y está recibiendo unas 360.000, que se convertirán en 460.000 con las de Moderna, pero seguirán siendo menos de la tercera parte.

Además, como explicó ayer Fernando Simón, los primeros efectos de la vacunación en la evolución de la epidemia «no se notará hasta finales de febrero o principios de marzo», lo que da una idea de lo queda por delante.

Galicia se sitúa al frente de las comunidades en el uso de las dosis disponibles 

El Ministerio de Sanidad actualizó ayer el registro de dosis de las vacunas administradas y sitúa a Galicia al frente de las comunidades con el 81 % de los viales disponibles ya inoculados, seguida por Asturias, con el 79,9 %. Aunque, en realidad, esos porcentajes no reflejan exactamente la situación, puesto que los datos gallegos son de ayer y los de Asturias del sábado.

En cualquier caso, en prácticamente todas las autonomías se observa un salto adelante más que significativo, que deja claro que, con el paso de los días y una vez superados los festivos, existe capacidad suficiente para administrar el producto que va llegando. Así, desde el viernes se han puesto 128.000 vacunas, más de 40.000 al día en fin de semana y con temporal de nieve. Cantabria, por ejemplo, que el viernes había dispensado el 19,7 %, ayer ya estaba en el 71,5 %.

Curiosamente, lo que no actualizó ayer Sanidad es el número de dosis entregadas, que sigue en 743.925, aunque el ministro del Interior aseguró que llegaron y se están distribuyendo sin incidencias. A Galicia, al menos, sí llegaron las 18.500 previstas «sen ningún problema», tal como informó el Sergas.

Reclamación del BNG

La portavoz del BNG, Ana Pontón, reclamó ayer la comparecencia en el Parlamento del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, para que explique el plan de vacunación y «as medidas extraordinarios que se deben tomar para frear esta terceira ola», porque calcula que a este paso se tardarán cuatro años en vacunar al 70 % de la población y seis para llegar al 100 %.

«Nadie mayor de 16 años tiene una razón para no vacunarse»

El Colegio de Médicos de Ourense hace un llamamiento a la población para que se inmunice

m. cobas

Miedo a lo desconocido, negacionistas, mucho humo e informaciones basadas en datos no contrastados. Todo eso se ha unido para que haya quien dice no a la vacuna del coronavirus. No son grandes cifras, pero sí hay casos. Y conocedores de la situación, desde el Colegio de Médicos de Ourense quieren hacer un llamamiento a la sociedad para que diga sí. Explica su presidente, José Luis Jiménez, que muchos ourensanos llegan a las consultas con preguntas. «Hay muchas dudas con el tema de las alergias, que lo confunden con intolerancias», dice el médico. Y rompe una lanza en favor de la vacuna. «No está habiendo efectos secundarios importantes», señala. Ante eso, asegura que «la respuesta a un paciente va a ser siempre ‘sí, vacúnese’».

Jiménez es tajante: «No hay nadie que tenga una razón para no vacunarse». El único requisito es tener más de 16 años (porque la de Pzifer no está testada en menores de esa edad; y la de Moderna es para mayores de 18 años). «Si la persona tiene 100 años la respuesta también es ‘sí, vacúnese’». La única excepción serían los alérgicos a la vacuna, que son aquellos alérgicos a la clara de huevo y que supone un volumen de población anecdótico.

«Necesitamos un 70-80 % de vacunación para que haya un efecto rebaño», remarca el presidente del Colegio Médico. Y habla a nivel mundial, no solo en España. «Hay que hacer un esfuerzo mundial para que llegue también al Tercer Mundo; por solidaridad y por interés: las fronteras son porosas y esta es una pandemia mundial», recuerda Jiménez, para después hacer hincapié en la necesidad de vacunar a cuanta más gente mejor.

Desde el Colegio Médico lo dejan claro: «No tenemos otra. Es que no funciona nada. Solo nos queda la vacuna» para tratar de frenar la transmisión. José Luis Jiménez dice entender los temores de algunos, por ser los primeros en recibir la vacuna, «pero te dan un fármaco, una aspirina, un ibuprofeno o un paracetamol, que tienen más efectos secundarios y la gente se los toma».

El presidente de los facultativos ourensanos defiende que hay que aumentar el ritmo de vacunación. «Tenemos que pedir a las Administraciones que vayan lo más rápido posible, porque estaremos salando vidas», señala. Y es por eso que desde el colectivo se han puesto a disposición de la Consellería de Sanidade para colaborar en las tareas de vacunación si es necesario. «Sabiendo y reconocimiento que el personal de enfermería es el grupo perfecto y con experiencia para hacerlo, estamos dispuestos a ayudar».