La líder birmana Aung San Suu Kyi se enfrenta a la Justicia sin abogado en un juicio «secreto»

La Voz REDACCIÓN

ACTUALIDAD

Nyein Chan Naing | EFE

Decenas de miles de personas se manifiestan contra el golpe en el país

17 feb 2021 . Actualizado a las 13:16 h.

La depuesta líder birmana, Aung San Suu Kyi, se enfrenta a la Justicia acusada de varios delitos sin defensa, según confirmó a Efe su abogado, en un proceso calificado de «secreto» después de que fuera detenida en el golpe de Estado ejecutado por los militares el 1 de febrero.

«No se me permite entrar en el tribunal porque no se me ha reconocido como el defensor de la señora Suu. Todavía no cuenta con una defensa legal», explicó hoy a Efe el abogado de la premio nobel de la Paz, Khin Maung Zaw.

Suu Kyi, que se encuentra en arresto domiciliario desde el levantamiento militar, fue acusada el 3 de febrero por importación ilegal de un dispositivo telefónico y este martes se le acusó además de un delito relacionado con la ley de desastres naturales. En lo que se considera la primera vista del juicio contra la líder electa, Suu kyi compareció la víspera por primera vez a través de una videoconferencia durante una hora ante el juez en un tribunal de la capital Naypidó. La siguiente vista será en dos semanas, según confirmó el letrado, que reveló que el magistrado que la juzga «acaba de ser nombrado».

Protestas en las calles

Mientras, decenas de miles de personas siguen protestando pacíficamente en las calles de las principales ciudades del país. Las mayores concentraciones se celebran en Rangún, la antigua capital, donde decenas de miles de personas se concentraron en diferentes puntos de la ciudad para protestar contra el levantamiento militar y pedir la liberación de la líder electa, Aung San Suu Kyi.

Bajo la pancarta de «Nunca nos pondremos de rodillas ante las botas de los militares» o «Liberad a nuestra líder», los asistentes, la mayoría jóvenes, desafiaron las amenazas de la junta, que la víspera acusó a los manifestantes de incitar a la violencia. A pesar del despliegue de policías y militares en el centro de Rangún, las protestas de hoy transcurrían hasta ahora de manera pacífica y sin la intervención de las fuerzas de seguridad.

En la segunda ciudad del país, Mandalay, miles de personas también salieron a las calles, incluidos estudiantes, ingenieros, granjeros y monjes. Las de hoy fueron las mayores protestas de esta semana, después de que la afluencia en las manifestaciones se mermara ante el temor a detenciones y a que los soldados utilizaran la violencia para aplacar el movimiento.