El Gobierno rebaja tres puntos, hasta el 6,5 %, el crecimiento esperado este año
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Pese al frenazo, mantiene que el PIB volverá al nivel precrisis al final del 2022
13 abr 2021 . Actualizado a las 20:32 h.La virulencia de la tercera ola, el efecto del temporal Filomena que paralizó medio país y el retraso en la vacunación malograron los brotes verdes de la economía en el primer trimestre del año, un período que fue «menos positivo de lo esperado», como admitió ayer la vicepresidenta segunda y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño. Este revés, que se suma al retraso en la llegada de los fondos europeos, ha obligado al Gobierno a enfriar el optimismo de sus previsiones de octubre, sobre las que se diseñaron los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Si seis meses atrás se esperaba un crecimiento inercial del PIB del 7,2 % para este año, que se elevaría hasta el 9,8 % con la llegada de los fondos comunitarios, ahora el Ejecutivo lo ha rebajado más de tres puntos, y apuesta por un alza sustancialmente más contenida, del 6,5 %.
Sin embargo, el cuadro macroeconómico para el período 2021-2024 actualizado ayer —que se enviará a Bruselas a finales de mes, junto con el Plan de Estabilidad— únicamente retrasa un trimestre la recuperación, ya que, como subrayó Calviño, para el 2022 se espera un crecimiento del 7 %.
El rebote se retrasa al 2022
De este modo, aunque se traslada al próximo ejercicio parte del rebote previsto para este, el saldo conjunto de los dos años se mantiene según lo previsto, confirmando el patrón de «V» asimétrica. «Se trata de una previsión prudente y muy alineada con los pronósticos de los analistas nacionales e internacionales», afirmó la ministra.
Lo cierto es que los anteriores cálculos del Ejecutivo habían sido rebajados por los demás organismos. El último en hacerlo —esta misma semana— fue la Autoridad Independientemente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que recortó del 8,2 al 6,6 % su última estimación, mientras que el FMI la elevó hasta el 6,4 %. El gráfico que ilustra esta información muestra que las actuales estimaciones del Gobierno se acercan más al consenso general.
La vicepresidenta sostuvo también que la previsión del Gobierno es que el PIB recupere su nivel precrisis a finales del próximo año, manteniéndose después en una fase expansiva que le devolvería al crecimiento anterior a la pandemia (del 2,1 %) en el 2024. En cualquier caso, insistió en que pese a esperarse una recuperación muy intensa a partir de la segunda mitad del año, la previsión es que el primer trimestre cierre en negativo.
ERTE de transición y menos paro
En lo que respecta a la tasa de paro, Calviño la situó en el 15,2 % al cierre de este año, mejorando la previsión de octubre, que la elevaba hasta el 16,9 %. La explicación está, según indició, en el mejor comportamiento mostrado por el empleo en esta crisis, ya que por primera vez no se alinean la caída del PIB con la destrucción de puestos de trabajo.
Sin embargo, la ministra admitió que será necesario prorrogar los ERTE que están en vigor hasta el próximo 30 de mayo, aunque —a diferencia de su homóloga de Trabajo, Yolanda Díaz, que la víspera había asegurado que se prolongarán prácticamente sin cambios— subrayó que serán ERTE «de transición», cuyo diseño se abordará con los agentes sociales para que el mecanismo «incentive la reincorporación de los trabajadores y la reactivación económica».