«Era una celebración íntima con veinte invitados», responde tras las quejas del hijo de Isabel Pantoja por no haber invitado a su prima Anabel
08 jun 2021 . Actualizado a las 14:20 h.Cuando parecía que la comunión de Francisco, el hijo en común de Kiko Rivera y Jessica Bueno, había logrado, nueve años después, calmar las aguas entre sus dos padres y que tuviesen una relación cordial por el bien del pequeño, parece que todo fue un espejismo.
El pasado fin de semana, Kiko Rivera, Irene Rosales y sus dos hijas, viajaron a Vitoria para celebrar junto a Jessica Bueno, su marido Jota Peleteiro y un pequeño grupo de familiares, la comunión del niño. Esta invitación parecía que era un punto de inflexión en una relación complicada en los últimos años después de que la pareja, que se conoció en Supervivientes, se separase cuando el pequeño apenas tenía cinco meses.
Unas declaraciones en Sálvame de Kiko Rivera quejándose de los motivos por los que solo habían sido invitados él, su mujer y sus hijas, y no había podido asistir a la comunión su prima, Anabel Pantoja, han provocado un gran enfado en Jessica Bueno, que no ha dudado en responderle públicamente a través de las redes sociales.
La sevillana explicaba que «me parece lamentable que se use un motivo como este para inventar y hacer daño cuando se ha actuado desde el corazón», a punto de dar a luz a su segundo hijo junto al futbolista gallego Jota Peleteiro.
«He organizado una fiesta en mi casa donde hemos sido los únicos responsables en todos los aspectos, y por respeto y amor hacia mi hijo han estado las personas que creía convenientes y que tienen trato directo con él. Por supuesto no podía faltar su padre, su esposa y sus hermanas», explicaba. «Creo que estoy en mi derecho de poder invitarles solo a ellos, ya que son los principales en la vida de mi hijo y no he querido entrar en temas personales que no me incumben invitando a otras personas de su familia», añadía. Según Bueno, ella ya había explicado al padre de su primer hijo cómo habían ideado la celebración. «Por favor, pido respeto hacia mi familia y hacia mi hijo», afirmaba.
Jessica Bueno, en la recta final de su tercer embarazo (dará a luz dentro de poco a un niño al que llamarán Alejandro), detalló cómo habían organizado la celebración. «Una celebración íntima con veinte invitados donde únicamente asistieron los cuatro padrinos de mis dos hijos con sus respectivas parejas e hijos. Mis padres y mis suegros porque además vuelvo a recordar que mi hijo pequeño también se bautizaba ese día. Mi hermano que hacía un año que no le veía (sin su mujer), nuestra catequista con su marido, el párroco de la iglesia, y tres mamás de los amigos íntimos de mi hijo mayor con sus maridos. El padre de mi hijo con su mujer, mi marido y yo», aseguró.
«Qué pena, de verdad, que algo que se ha hecho con la mayor buena intención, aún sabiendo que se convertiría en un circo cuando huyo de esto siempre al final se use para decir mentiras», se lamentaba. «Qué poco respeto, aún estando en mi estado, y ese día me lo pasé intentando que todo el mundo estuviera feliz y no les faltase de nada. Y creo que así fue», añadía.
Un fin de semana de celebración
Un día después de la celebración, los Peleteiro-Bueno, seguían de celebración. Según explicaba Jessica Bueno, Jota Peleteiro recibía los tres sacramentos, y ella se confirmaba. «Hoy hemos vuelto a la Parroquia de San Francisco Javier en Bilbao para continuar con un finde muy especial para nosotros. Hoy he recibido la confirmación y mi marido ha recibido los tres sacramentos. Se ha bautizado, realizado la primera comunión y confirmación», explicaba.
«Llevamos todo el año asistiendo a catequesis cada jueves juntos, hemos tenido la inmensa suerte de tener una persona que nos ha guiado, enseñado y transmitido de una forma preciosa el significado de la fe y los valores tan importantes que nos inculca Dios. Me siento muy agradecida por sentirme mucho más cerca de él, por sentir que nos cuida y nos guía siempre. Seamos buenas personas, cuidemos a los que nos rodean y vivamos en paz en nuestra vida. Debemos transmitir amor y sentirnos felices por la vida que tenemos», explicó.