Calviño asegura que no ha debatido la subida del salario mínimo con Yolanda Díaz

Redacción LA VOZ

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La vicepresidenta se abre a la regulación de precios del alquiler «en determinadas circunstancias»

17 jun 2021 . Actualizado a las 19:50 h.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, aseguró este jueves que la posible subida del salario mínimo interprofesional (SMI) «no se ha tratado ni discutido» dentro del Gobierno, y que ni siquiera ha abordado el asunto con la vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

En declaraciones a la Ser recogidas por Europa Press, Calviño recordó que el Ejecutivo de Pedro Sánchez es el que más ha incrementado el SMI, un 30 % en solo tres años, y que está comprometido con seguir elevándolo a lo largo de la legislatura. Pero sigue mostrándose reacia a abordar una nueva subida hasta que se consolide la recuperación de la economía y del mercado de trabajo tras la pandemia, con el objetivo de no perjudicar la creación de empleo, particularmente del juvenil: «Hicimos bien en ser prudentes en diciembre», señaló la vicepresidenta en alusión a la decisión de mantener congelado el SMI en lo que va del 2021.

Regulación del alquiler

Por otro lado, Calviño afirmó que «no tiene noticias» de que se haya alcanzado un acuerdo con Unidas Podemos en materia de vivienda y que lo que está sobre la mesa es la propuesta del ministro Ábalos. «Yo no tengo noticias de que haya habido un acuerdo, pero espero que lo haya pronto (...) Es público que hay distintos puntos de vista y es obvio que hay que llegar a un acuerdo y que sea un proyecto de ley equilibrado». «No hay una varita mágica» para solucionar los problemas de acceso a una vivienda que afectan sobre todo a los jóvenes, recordó Calviño, que insistió en que «no se trata de regular un precio en el BOE o en una ley», sino de actuar sobre distintas palancas impulsando la oferta de vivienda y la vivienda pública. Eso sí, la vicepresidenta se mostró abierta a la posibilidad de permitir que las administraciones puedan regular precios en determinadas circunstancias.

«Dar un marco, instrumentos para que las autoridades competentes puedan regular precios en determinadas circunstancias puede ser un instrumento, pero no pensemos que esta puede ser la solución a los problemas de vivienda que venimos arrastrando después de una década», aseguró durante la entrevista.

No revisará el crecimiento hasta otoño

En cuanto a la aceleración de la recuperación por el avance de la vacunación y el levantamiento de las restricciones, Calviño descartó revisar por ahora las previsiones de crecimiento económico a pesar de que todos los indicadores son positivos: «No veo la necesidad. En otoño en todo caso es cuando tendríamos que revisarlas».

Preguntada por si cree que España «se va a salir», como aventuró ayer la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, Calviño subrayó que su percepción es que en España «hay mucho talento y muchas ganas» y que tanto los fondos europeos como el ahorro impulsará la economía en la segunda parte del año. «Tenemos que aprovechar para que no sea un rebote pasajero», remarcó la vicepresidenta, que apuntó que ayer, durante su visita al Círculo de Economía en Barcelona, percibió un ambiente de «optimismo» y que de lo que se trata ahora es de que el sector productivo y los servicios pongan «velocidad de crucero lo antes posible» para que la oferta se acompase al estímulo de la demanda.

Fondos europeos

Precisamente, sobre los fondos europeos, Calviño negó que los 19.000 millones de euros que recibirá este año España sean menos de lo inicialmente previsto, a pesar de que en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del 2021 se consignaron 27.000 millones de euros a cargo del plan de recuperación. «(Bruselas) tiene que cubrir la prefinanciación de los planes de todos los países, y por eso ha sido más bien una cuestión de ajustar nuestros programas de emisión de deuda, pero no afecta en absoluto a la ejecución del plan», afirmó la vicepresidenta, que en todo caso recordó que no se trata de concentrarlo todo en un año, pues hay un total de seis años para ejecutar el plan.

Por ello, reclamó «tranquilidad» respecto a cuándo llegarán los fondos a España, pues el calendario «no altera la capacidad de financiación de las inversiones previstas en el plan» debido a las emisiones de deuda proyectadas. De esos 19.000 millones previstos este año, habrá un primer pago de 9.000 millones de euros antes de final de verano y otros 10.000 millones llegarán en la segunda mitad del ejercicio. «España será el país que más fondos reciba en estos primeros tres años: 19.000 millones este año, 18.000 millones en el 2022 y 17.000 millones en el 2023. Son cifras sin comparación con los fondos estructurales que normalmente recibimos. Por eso siempre hemos dicho que esto es una oportunidad histórica», destacó.