Sánchez negocia ya el apoyo de ERC a los Presupuestos para afianzar su mayoría

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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 El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez), recibe al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, durante su encuentro este martes en el Palacio de la Moncloa.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez), recibe al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, durante su encuentro este martes en el Palacio de la Moncloa. JUAN CARLOS HIDALGO

Los republicanos supeditan su respaldo a las cuentas públicas a los avances en la mesa de diálogo y Podemos presiona para que incluyan una reforma fiscal

06 jul 2021 . Actualizado a las 10:44 h.

El acercamiento entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonés, va más allá de la mesa de negociación sobre el conflicto catalán. Tras la reunión del pasado martes en la Moncloa, ambos abordan ya el apoyo de ERC a los Presupuestos del 2022. Olvidada cualquier vía alternativa con Ciudadanos, tanto Sánchez como Aragonés saben que solo habrá cuentas públicas si llegan a un acuerdo. Y el jefe del Gobierno comprobará pronto si hay agua en esa piscina. A finales de julio se votará en el Congreso el techo de gasto, primer paso de la tramitación presupuestaria. El voto a favor de ERC sería una clara señal de que hay posibilidades de acuerdo.

Aunque el Gobierno considera garantizada la legislatura con los Presupuestos del 2021, que podrían prorrogarse, Sánchez quiere reflejar una amplio respaldo parlamentario que contrarreste las encuestas que dan la mayoría a PP y Vox. Las cuentas del 2021 salieron adelante con 188 votos a favor. ERC no ocultó ayer su voluntad de apoyar de nuevo los Presupuestos, pero supeditó la negociación no solo a su contenido, en referencia a que se atiendan las reclamaciones de la Generalitat en cuanto a inversiones e infraestructuras, sino también a que la mesa de diálogo con el Gobierno sobre el «conflicto» en Cataluña se mantenga. «Que esté abierta la vía del diálogo es imprescindible para poder entrar a negociar los Presupuestos. Y estamos ahí», señaló Marta Vilalta, secretaria general adjunta de ERC. Las dos negociaciones, según dijo la portavoz republicana, van «en paralelo».

Podemos exige la reforma fiscal

Sánchez y Aragonés acordaron reabrir la mesa de diálogo precisamente en septiembre, cuando el Gobierno presentará su proyecto de Presupuestos y comenzarán las verdaderas negociaciones para sacarlos adelante. Pero, aunque el jefe del Ejecutivo tiene prisa por ver reflejada su mayoría, la negociación no será fácil. Ni con ERC, ni con sus propios socios de Gobierno de Unidas Podemos. Con Pablo Iglesias a la cabeza, la formación mantuvo el pulso con el PSOE hasta el último momento en el 2020. Y ahora, con Yolanda Díaz como referencia en el Ejecutivo e Ione Belarra al frente de Podemos, se prepara para una batalla similar.

De momento, Podemos exige ya que las cuentas del 2022 incluyan una reforma fiscal que aplique un impuesto de sociedades mínimo del 15 %, tal y como acordó el G-7 con el impulso del estadounidense Joe Biden. Un primer escollo que costará salvar, porque, aunque Sánchez lo respalda de cara al futuro, ya lo descartó para el siguiente ejercicio. «No vamos a abrir en los Presupuestos del 2022 una revisión del modelo fiscal, que está pendiente, pero no para el próximo año», dijo el pasado viernes. Los otros caballos de batalla de Podemos son la subida del salario mínimo, que se resolverá este mes, y, como en los Presupuestos del año pasado, el control de los precios del alquiler en la Ley de Vivienda, aún atascada.