Los talibanes cercan a las fuerzas afganas ante la retirada de las tropas internacionales

Lucía Roibás, M.B. REDACCIÓN / LA VOZ

ACTUALIDAD

Un miembro de las fuerzas de seguridad afganas, después de volver a tomar el control de la ciudad de Herat tras un ataque de los talibanes
Un miembro de las fuerzas de seguridad afganas, después de volver a tomar el control de la ciudad de Herat tras un ataque de los talibanes JALIL REZAYEE

Seis capitales fueron conquistadas en los últimos cinco días

09 ago 2021 . Actualizado a las 21:35 h.

Aybak se convirtió este lunes en la sexta capital de provincia de Afganistán conquistada por los talibanes en menos de una semana. Los integristas tomaron el control de la ciudad, situada en la región norteña de Samangan, después de meses atacando varios distritos de la provincia. Las fuerzas gubernamentales, mermadas ante la falta de apoyo internacional, no ofrecieron resistencia.

La ciudad de Mazar-e-Sharif, capital de la provincia de Balkh, también fue blanco de una ofensiva, que pudo ser repelida por los cuerpos de seguridad, aunque la versión oficial difiere de la de los insurgentes. La policía de Balkh asegura que los ataques «fueron rechazados» y que las fuerzas aéreas bombardearon varios escondites de los integristas, mientras que el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, declaró que lograron entrar en la ciudad.

Avance imparable

La conquista de Aybak supone una victoria más para los insurgentes, que avanzan por el territorio afgano de manera imparable y pretenden invadir todas las provincias antes de irrumpir en la capital de Afganistán, Kabul.

A lo largo de cinco días los talibanes han conseguido capturar las capitales provinciales de otras cinco regiones, un logro inédito en los veinte años de conflicto. En las últimas horas se han sucedido combates en 13 de las 34 provincias del país, que dejan cientos de civiles muertos.

El rápido progreso de los insurgentes pone de manifiesto las carencias de las fuerzas afganas, que se ven cercadas sin la ayuda de las tropas internacionales.

En febrero del 2020 el Gobierno de EE.UU. y los talibanes firmaron un acuerdo de paz en el que se estipulaba de que las tropas estadounidenses y sus aliados de la OTAN se retirarían definitivamente de Afganistán tras 20 años.

A lo largo de los últimos meses el Ejército estadounidense ya fue abandonando progresivamente las principales bases, como la de Bagram. El plazo simbólico marcado ahora para sacar a las fuerzas del país es el 11-S, dos décadas después de los atentados de las Torres Gemelas. A partir de entonces, solo 1.000 soldados estadounidenses permanecerán en territorio afgano.