El incendio de Sierra Bermeja, el primero de España de sexta generación

La Voz REDACCIÓN / AGENCIAS

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Los 19 ocupantes de un helicóptero del Infoca, salen ilesos de una accidente durante las tareas de extinción

13 sep 2021 . Actualizado a las 17:25 h.

Los medios aéreos han empezado en la mañana de este lunes a operar de nuevo en el incendio de Sierra Bermeja,  «tras una intensa noche de trabajo de los medios terrestres» aunque con «mejores condiciones en líneas generales en todo el perímetro», apunta la Consejería de Desarrollo Sostenible ante un incendio que sigue creciendo y que, en un solo día, ha duplicado su tamaño y ha obligado a desalojar seis pueblos de la zona ante la proximidad de las llamas.

Uno de los helicópteros Superpuma del Plan Infoca ha sufrido este lunes un accidente durante las tareas de extinción. Sus 19 ocupantes están bien y no hay que lamentar daños personales. El accidente, según han informado fuentes del Gobierno andaluz, ha ocurrido al levantarse una nube de polvo formada por los trabajos de la maquinaria pesada, que ha impedido la visibilidad del piloto del helicóptero. El aparato ha colisionado contra un árbol y ha caído al suelo, sin que afortunadamente se hayan producido daños personales.

En total 2.670 personas han tenido que ser desalojadas y 7.400 hectáreas de terreno ya han sido arrasadas. Las cifras reflejan la voracidad del incendio, «el más complejo conocido por los servicios de extinción forestales en los últimos tiempos», tal y como reconoció a última hora del domingo, Juan Sánchez, director del Centro Operativo Regional (COR) del Plan Infoca. «Llevamos mucho hablando de las consecuencias del abandono del medio o del cambio climático. Hoy las estamos viviendo», abundó para explicar que el fuego es de sexta generación, el primero de este tipo en España. ¿Qué significa esto?

Son los más violentos y se caracterizan porque pueden tener un comportamiento muy errático que puede llegar a poner en peligro la seguridad de todo el dispositivo de extinción e incluso de toda la gente que pueda estar allí. «Este tipo de fuegos generan una nube de condensación debido al calor del fuego que, en función de la diferencia de la temperatura entre el suelo y las capas altas, tiene más o menos capacidad para penetrar en la atmósfera», explicó el subdirector regional del Infoca, Alejandro García.

«En las capas altas, más frías, puede haber humedad. Cuando esa circunstancia se da, se van cargando de agua y, por tanto, de peso, y van perdiendo la fuerza de inercia hacia las capas altas. Se empiezan a ensanchar y cuando se separan de la fuente de alimentación se derrumban», explica García. «Al derrumbarse, todas las pavesas incandescentes que contienen las columnas de humo, empiezan a arder de nuevo, porque al no haber oxígeno, arden muy lentamente. Al caer vuelven a pasar por oxígeno y salen a encenderse. De esas miles de pavesas, decenas, cientos, caen». Es un fenómeno muy peligroso para los operativos, ya que puede producir atrapamientos masivos, «como vimos en aquellas 32 personas en Pedrogao (Portugal) en 2017», recordó. 

Además, desde el Infoca también indican que la noche del domingo ha vuelto a ser una «noche intensa en todos los frentes», aunque trabajaron con «mejores condiciones en líneas generales en todo el perímetro». En estos momentos, los esfuerzos se dirigen a contener el flanco Este y su avance hacia Casares y Monte Duque.

Vista del pueblo de Algatocín junto a una nube de humo que proviene del incendio declarado en Jubrique
Vista del pueblo de Algatocín junto a una nube de humo que proviene del incendio declarado en Jubrique David Arjona | EFE

Reunión técnica

Mientras tanto se produce la reunión técnica en la que se determinará la estrategia para acabar con el fuego que se declaró en la noche del miércoles. La jornada del domingo se elevó a el número de afectados de Jubrique, Genalguacil, Faraján, Pujerra, Alpandeire y Júzcar tras complicarse por el paveseo, es decir, el material incandescente procedente del primer incendio que provocó un nuevo frente en Jubrique.

El total de evacuados por este incendio «inédito», con 85 kilómetros de perímetro, se elevó durante el domingo a 2.670 personas, pero un millar de Estepona y Benahavís pueden ya volver a sus casas, bajo vigilancia de los bomberos del Consorcio Provincial de Málaga. El grueso de los evacuados en el resto de las localidades están en Ronda y también en municipios como Algatocín, Cortes de la Frontera o Benarrabá.

Todos los desalojos se han producido de forma anticipada y con las máximas medidas de seguridad, de acuerdo al Plan de Contingencia diseñado y, según la Junta de Andalucía, los alcaldes de estas seis poblaciones habían sido prealertados y han estado informados en todo momento del minuto a minuto del operativo.

El subdirector del Centro Operativo Regional (COR) del Infoca, informó de los cambios que se produjeron durante la noche y en las primeras horas del día, lamentando que pese al buen trabajo realizado durante la madrugada la pavesa fue una «circunstancia sobrevenida: es algo posible pero no previsible y ha generado un nuevo incendio».

En sus declaraciones, García aludió a la «potencia y fuerza inusitada» de este fuego respecto a los «que estamos acostumbrados a ver en nuestro país». De hecho, debido a la irrupción de la pavesa y la generación de un nuevo incendio en Jubrique se solicitó la activación de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que desde mediodía está trabajando en el terreno y que cuenta con 260 efectivos del II Batallón de Intervención en Emergencias.

En la noche del domingo, el director del COR del Infoca, Juan Sánchez, aseguró que se trata del incendio «más complejo que hemos conocido los servicio de extinción de incendios forestales en los últimos tiempos». También lamentó que las predicciones meteorológicas «han fallado continuamente algo que para nosotros es clave: la velocidad y dirección del viento».

Sánchez admitió que estar junto al Estrecho provoca unas previsiones más complejas, por lo que la llegada del equipo de especialistas del FAST va a permitir «afinar más». En este sentido, si esas predicciones actuales se cumplen los trabajos durante esta noche se prevén más favorables aunque se cuenta «con un Plan B o C porque hasta ahora las previsiones lo que han hecho es jugarnos una mala pasada»

También se activaron durante el día los equipos FAST, especialistas de otras comunidades a los que se ha pedido equipos de radiosondeo y uno de especialistas en uso de maquinaria pesada, que en este incendio está muy limitada debido a la orografía escarpada del terreno. Todo para afinar lo máximo posible la intervención.

Igualmente, siguen cerradas al tráfico rodado la carretera MA-8302 en el kilómetro 15 en Genalguacil y la MA-8301 está cortada del kilómetro 3,5 en Estepona hasta el 32 en Jubrique. También la MA-7306 desde el kilómetro 0 en Parauta al 5 en Cartajima, la MA-7307 en Alpandeire, entre los kilómetros 0 y 8, la MA-8304 del kilómetro o al 5 en Genalguacil y la MA-8305 desde el km 0 en Algatocín al 12 en Jubrique. También este lunes desde el 112 han añadido el corte en Pujerra de la MA-7300 en el kilómetro 5. Asimismo no se puede cicular por el camino forestal MA-527, que da paso precisamente a la MA-7300.