Controlado el gran incendio forestal en Sierra Bermeja, Málaga

La Voz REDACCIÓN

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Vista del incendio de Sierra Bermeja
Vista del incendio de Sierra Bermeja ALVARO CABRERA | Efe

La lluvia ha ayudado a las tareas de extinción del fuego, que afecta a 7.800 hectáreas y obligó a desalojar de sus casas a 1.366 vecinos

14 sep 2021 . Actualizado a las 09:14 h.

El grave incendio forestal que afectaba en Málaga a la zona de Sierra Bermeja ha sido dado por controlado por la dirección andaluza de medios de extinción, el Infoca. El fuego, declarado el pasado miércoles, afecta a unas 7.800 hectáreas y obligó al desalojo de 1.366 vecinos de cinco pueblos, que ahora podrán volver a casa. 

La nueva situación la adelantaron públicamente los medios de extinción y fue confirmada por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, quien ha añadido: «La lluvia que cae desde hace horas ha sido la mejor aliada del intenso y admirable trabajo de los retenes», ha escrito en un mensaje en Twitter, consultado por Europa Press.

«Ahora queda una fase compleja hasta su extinción»

Moreno ha añadido, por tanto, de que se activa el nivel 0. «Ahora queda una fase compleja hasta su extinción», ha escrito en el mensaje, en el que también da ánimos.

El trabajo de los efectivos que luchan contra el fuego permitió que desde la pasada noche los 1.300 vecinos de los municipios de Jubrique, Faraján, Júzcar, Alpandeire y Pujerra que tuvieron que ser desalojados el pasado domingo de forma preventiva por el incendio pudieran ir volviendo a sus casas.

Durante las tareas de extinción, uno de los helicópteros Superpuma desplegados para luchar contra el fuego sufrió un accidente el lunes. Llevaba 19 personas a bordo, pero no hubo que lamentar daños personales. El siniestro, según  fuentes del Gobierno andaluz, ocurrió al levantarse una nube de polvo formada por los trabajos de maquinaria pesada, que ha impedido la visibilidad del piloto del helicóptero. El aparato colisionó contra un árbol y ha caído al suelo.

Un incendio de sexta generación

El fuego de Sierra Bermeja es considerado «el más complejo conocido por los servicios de extinción forestales en los últimos tiempos», tal y como reconoció a última hora del domingo, Juan Sánchez, director del Centro Operativo Regional (COR) del Plan Infoca. «Llevamos mucho hablando de las consecuencias del abandono del medio o del cambio climático. Hoy las estamos viviendo», abundó para explicar que el fuego es de sexta generación, el primero de este tipo en España. ¿Qué significa esto?

Son los más violentos y se caracterizan porque pueden tener un comportamiento muy errático que puede llegar a poner en peligro la seguridad de todo el dispositivo de extinción e incluso de toda la gente que pueda estar allí. «Este tipo de fuegos generan una nube de condensación debido al calor del fuego que, en función de la diferencia de la temperatura entre el suelo y las capas altas, tiene más o menos capacidad para penetrar en la atmósfera», explicó el subdirector regional del Infoca, Alejandro García.

«En las capas altas, más frías, puede haber humedad. Cuando esa circunstancia se da, se van cargando de agua y, por tanto, de peso, y van perdiendo la fuerza de inercia hacia las capas altas. Se empiezan a ensanchar y cuando se separan de la fuente de alimentación se derrumban», explica García. «Al derrumbarse, todas las pavesas incandescentes que contienen las columnas de humo, empiezan a arder de nuevo, porque al no haber oxígeno, arden muy lentamente. Al caer vuelven a pasar por oxígeno y salen a encenderse. De esas miles de pavesas, decenas, cientos, caen». Es un fenómeno muy peligroso para los operativos, ya que puede producir atrapamientos masivos, «como vimos en aquellas 32 personas en Pedrogao (Portugal) en 2017», recordó.