Un descubrimiento sobre los receptores de la temperatura y el tacto se impone en el Nobel de Medicina al de las vacunas del covid

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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Jessica GowPOOL

Los ganadores del galardón son los científicos estadounidenses David Julius y Ardem Patapoutian

04 oct 2021 . Actualizado a las 22:55 h.

 El Premio Nobel de Medicina 2021 es para David Julius y Ardem Patapoutian por sus descubrimientos sobre los receptores de la temperatura y el tacto, informó la Asamblea Nobel del Instituto Karolinska de Estocolmo.

El Nobel de Medicina es el primero de la ronda de estos prestigiosos premios, a los que seguirán los anuncios en días sucesivos de los de Física, Química, Literatura, de la Paz y finalmente el de Economía, el próximo lunes.

El descubrimiento de Julius y Patapoutian se impuso al de Katalin Karikó y Drew Weissman, que sonaban en todas las quinielas como ganadores del Premio Nobel de Medicina 2021. No en vano, su trabajo sobre cómo usar el ARN mensajero sintético para combatir enfermedades ha sido crucial para poder desarrollar dos de las vacunas contra la covid, la de Pfizer BioNTech y la de Moderna, con las que ya se han inmunizado a cientos de millones de personas en todo el planeta.

Patapoutian utilizó células sensibles a la presión para descubrir una novedosa clase de sensores que responden a estímulos mecánicos en la piel y los órganos internos.

Los descubrimientos de ambos, tal y como se indicó hoy, «nos han permitido entender cómo el calor, el frío, la fuerza mecánica puede iniciar los impulsos nerviosos que nos permiten percibir y adaptarnos al mundo a nuestro alrededor», según el Instituto Karolinska.

Básicamente, sus trabajos, según explicaron los responsables de este «importante y profundo descubrimiento», explican cómo el calor, el frío y el tacto pueden desencadenar respuestas en el sistema nervioso.

El estadounidense Julius utilizó capsaicina, un compuesto picante de los pimientos chile (chilli peppers) que provocan una sensación de ardor para identificar un sensor en las terminaciones nerviosas de la piel que responden al calor.

Patapoutian, estadounidense de origen libanés, utilizó células sensibles a la presión para descubrir una nueva clase de sensores que responden a los estímulos mecánicos en la piel y en los órganos internos.

Los conocimientos propiciados por las investigaciones de los dos premiados se usan para el desarrollo de tratamientos en una amplia variedad de dolencias, como el dolor crónico.