El fin de la campaña estival destruye 175 empleos al día en Galicia en septiembre
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En España se crean 57.400 puestos gracias al tirón del nuevo curso escolar
04 oct 2021 . Actualizado a las 19:36 h.El verano terminó. Y con él, se esfumaron miles de contratos temporales con los que bares y restaurantes, hoteles o comercios reforzaron sus plantillas para hacer frente a los picos de actividad durante la campaña estival.
En Galicia, los datos del mercado laboral en septiembre se escriben siempre con números rojos. Y el de este año no ha sido la excepción: la Seguridad Social perdió una media 5.241 afiliados, lo que equivale a casi 175 empleos destruidos cada día. Con este descenso, el promedio de cotizantes en la comunidad cayó a 1.034.229, aunque sigue muy por encima del nivel de ocupación previo a la pandemia (son casi 22.000 más que en febrero del 2020).
El frenazo del mercado de trabajo en la comunidad contrasta con la buena tendencia que mantiene en el conjunto de España, donde se crearon, en promedio, 57.387 nuevos puestos de trabajo el mes pasado, hasta un total de 19.531.111 trabajadores en alta laboral, rozando el máximo histórico de julio del 2019 (aunque, a diferencia de entonces, hay casi medio millón de trabajadores subsidiados, entre los ERTE y las ayudas de autónomos).
Si se elimina el efecto estacional y de calendario que siempre condiciona los datos de empleo, el alza es aún mayor, con una subida de 82.184 cotizantes, según los cálculos del Ministerio de Seguridad Social.
Detrás de ese repunte, el segundo mayor de un septiembre en toda la serie histórica (solo superado por el del año pasado) está de nuevo el tirón del sector educativo, que creó 47.700 puestos de trabajo en el inicio del curso escolar. Destaca también cómo se disparan los contratos de puesta a disposición a través de empresas de trabajo temporal, que crecen casi un 6,4 %.
Unos datos que permitieron al Gobierno sacar pecho a cuenta de la «robusta recuperación», como la definió la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, mientras que su homóloga de Economía, Nadia Calviño, destacó que desde febrero se han creado 1,3 millones de puestos de trabajo efectivos, unas «cifras que no habíamos vivido en nuestra historia».
Ese repunte de la afiliación viene acompañado, además, de una intensa caída del paro registrado, que en septiembre bajó en 76.113 personas, el mayor descenso en este mes de toda la serie histórica, encadenando siete meses consecutivos a la baja, algo que como recordaron desde el Ministerio de Trabajo no ocurría desde hace más de dos décadas.
Desde marzo, son más de 750.000 las personas que se han borrado de las listas de demandantes de empleo del SEPE, con lo que el número total de parados registrados en las oficinas de empleo cae hasta los 3.257.802, apenas diez mil más de los que había antes de la pandemia.
El paro sube en la comunidad
Del total de parados, 153.054 son gallegos. La comunidad es una de las pocas que rompe con la tendencia general y se anota una subida del desempleo, con 1.790 inscritos más. En cualquier caso, si se abre el foco y se analiza la evolución de los últimos doce meses el paro cayó en más de 23.500 personas.
Mientras desde la Xunta destacan que Galicia puede presumir de niveles de afiliación y desempleo mejores que los que había en febrero del 2020, justo antes de la crisis sanitaria, los sindicatos urgen a la Administración autonómica a «tomar medidas ante uns datos do paro moito peores que a media estatal», como reclamaron desde CC.OO. Por su parte, UGT reclamó que la recuperación se construya sobre la base de «emprego estable».
Más de 20.000 gallegos siguen con su futuro laboral en el aire: 9.800 asalariados en ERTE y 10.200 autónomos cobrando paro
La euforia del Gobierno por la buena evolución del mercado laboral, acompasada al avance del proceso de recuperación y la desescalada sanitaria, fue rebajada por la patronal CEOE, desde donde advirtieron que «los datos macroeconómicos rebajan el optimismo sobre la intensidad del proceso de recuperación». No solo porque hace pocos días que el INE revisó el crecimiento del segundo trimestre (del 2,8 al 1,1 %), sino porque todavía quedan tareas pendientes, como devolver al mercado de trabajo a los 239.230 trabajadores que continúan inmersos en un expediente de regulación temporal de empleo. Aunque en septiembre hubo 32.960 afectados por un ERTE que retomaron su actividad, cada mes que pasa se evidencia la «mayor dificultad» del mercado de trabajo para reabsorber a estos asalariados que mantienen su contrato suspendido o su jornada reducida, según advirtió ayer Funcas, la fundación de las antiguas cajas de ahorros, que apuntó que «todavía persiste un déficit de 415.000 empleos» respecto a los niveles prepandemia, por los ERTE y los autónomos que se mantienen inactivos cobrando ayudas.
En Galicia, son actualmente unos 20.000 los puestos de trabajo que siguen en ese limbo creado durante la pandemia. Y es que a los 9.842 trabajadores que seguían en ERTE al cierre de septiembre, casi mil menos que a finales de agosto, hay que sumar 10.250 trabajadores por cuenta propia que cobran alguna prestación extraordinaria por cese temporal de la actividad o caída de la facturación (dos mil menos de los que la han solicitado).
El riesgo para los próximos meses es que los ERTE que se mantienen están más de la mitad concentrados en la hostelería y el comercio, dos sectores que no suelen tener una buena evolución en el tramo final del año.
El Gobierno admite que las empresas, cuanto más tiempo pasan en ERTE, más difícil tienen la reactivación, pero niega que se trate de compañías zombis y considera que «la gran mayoría» de estos trabajadores serán capaces de volver al mercado laboral puesto, en su anterior empleo o en otro.