Sánchez reafirma su liderazgo en un Congreso del PSOE sin divisiones

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado VALENCIA | ENVIADO ESPECIAL

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Rober Solsona | EUROPA PRESS

Los socialistas apuestan por la «desconcentración» y abolir la prostitución

16 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Muy poco o nada tiene que ver el contexto bajo el que se celebra el 40 Congreso Federal del PSOE, que arrancó ayer en Valencia, con el celebrado hace cuatro años en Madrid. Entonces, los socialistas estaban sumidos en una disputa interna que se saldó con el triunfo de un Pedro Sánchez catapultado por las bases sobre la corriente oficialista. La cicatrización de las heridas se antojaba complicada, pero no existe mejor bálsamo que el poder, por lo que apenas quedan ya señales de división, y las únicas muestras de contestación llegan a cuentagotas y cada vez más suaves a cargo de Page y Lambán, presidentes de Castilla-La Mancha y Aragón. Sánchez también puso mucho de su parte para cerrar la herida con la remodelación que llevó a cabo en el Gobierno, encaminada hacia una reconciliación con el llamado viejo PSOE.

El Congreso concluirá el domingo con Sánchez refrendado como secretario general con una exhibición de fortaleza ante unos 5.000 afiliados. Pero el cónclave no va solo de mostrar músculo ante los adversarios políticos. Se trata del máximo órgano de decisión del partido, y de este fin de semana saldrán los integrantes de los tres órganos de dirección nacional: la Comisión Ejecutiva Federal, lo que comúnmente se conoce como la cúpula del partido; el Comité Federal, que es el máximo órgano entre congresos;, y el Comité de Ética y Garantías, encargado de arbitrar entre posibles conflictos internos. Y finalmente, del Congreso saldrá también el documento que fijará las bases de la acción política en los próximos años. Existen varios temas de debate, algunos ya casi históricos dentro del PSOE.

La «Desconcentración»

Instituciones. La «desconcentración» es una de las últimas grandes apuestas del presidente. Según recoge la ponencia marco, el documento base que este fin de semana se enriquecerá con las enmiendas, pretende desactivar «la amenaza del neocentralismo». En otras palabras, la voluntad de ubicar ciertas instituciones del Estado más allá de Madrid, una cuestión por la que la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, acusó a Sánchez de querer «destrozar» su territorio.

Respecto a la financiación autonómica, se afirma el compromiso de avanzar hacia un nuevo modelo, pero sin especificar más detalles. Los socialistas catalanes del PSC presentaron una enmienda para «luchar contra el dumping fiscal entre comunidades», una armonización de impuestos autonómicos en clara referencia a los pocos tributos que se pagan en Madrid.

Modelo de Estado

Federalismo. El PSOE defiende el «fortalecimiento del Estado Autonómico siguiendo los mejores ejemplos de países de nuestro entorno con estructuras federales exitosas». Algunos dirigentes como Ximo Puig son más claros y quieren abrir ya un debate sobre una modificación legal.

Monarquía. Transitar hacia una República es una reclamación histórica de las juventudes del partido, pero también un tema que la dirección no quiere abrir. La ponencia recoge la voluntad por «profundizar en la transparencia y rendición de cuentas de todas las instituciones del Estado, incluida la Casa Real». La militancia de Madrid pide acabar con la «inviolabilidad del rey».

Otros debates

La jornada laboral. El PSOE se muestra partidario por rebajar las 40 horas semanales. Otra enmienda pretende acabar con las «puertas giratorias», que parece redactada a consecuencia del fichaje de Carmona por Iberdrola. Otro debate girará en torno a la sustitución de los términos género por sexo y trans por transexual. Ximo Puig ha logrado con su presión que se abrace el compromiso de abolir la prostitución.

Todos pendientes de la nueva ejecutiva, que será más «joven» y «femenina»

Biel Aliño | EFE

Solo Pedro Sánchez sabe los nombres de los que integrarán la nueva ejecutiva federal. Será notablemente más reducida que la saliente, integrada por 49 miembros, según afirmaron fuentes cercanas al secretario general. Las otras dos claves que aportaron estas fuentes fueron que será «más joven» y con más presencia «femenina». Sí está claro que Cristina Narbona seguirá siendo la presidenta, que Santos Cerdán continuará al frente de la secretaría de Organización, un puesto clave que ocupó tras la salida de Ábalos, y que Adriana Lastra se mantendrá como una vicesecretaria general con poderes. La propia Lastra apuntó a que este órgano podría reforzarse con miembros del Gobierno. Todas las miradas apuntan a Félix Bolaños, ministro de la Presidencia. María de los Llanos Castellanos, directora adjunta del Gabinete de Presidencia, también integrará la cúpula del partido.

Abel Caballero tiene garantizada su presencia por ser miembro nato como presidente de la FEMP. Y con unas primarias a la vuelta de la esquina, todavía está en el aire el nombre de otro posible gallego o gallega que pudiera formar parte de este grupo.