Batet pide lealtad a la Constitución «plenamente vigente» y símbolo de pacto

La pandemia volvió a llevar los actos de la Constitución a la calle. En concreto, a la Carrera de San Jerónimo, a la altura de la Puerta de los leones que custodian el acceso principal al Congreso de los Diputados. La presidenta de la Cámara Baja, Meritxell Batet, pronunció un discurso por el 43 aniversario de la Carta Magna en el que reivindicó que se trata de un texto «plenamente vigente», símbolo del pacto político y para el que reclamó una «lealtad» que, considera, brilla por su ausencia en los últimos tiempos.

Pedro Sánchez realizó también una breve intervención en el patio del Congreso Pedro Sánchez con ese mismo espíritu, apelando a «cuidar» una Constitución de 1978 que nació como fruto de un acuerdo durante la Transición que «costó mucho conseguir», por ello, invitó a cumplirla punto por punto, «de pe a pa», detalló, en lo que pareció una clara referencia al PP, formación a la que acusa de boicotear la renovación del CGPJ.

Por su parte, el líder del principal partido de la oposición, Pablo Casado, denunció una incongruencia entre las palabras de Sánchez y sus acciones, acusando al jefe del Ejecutivo de ser la persona que «más a atacado la Carta Magna en 40 años», responsabilizándolo de gobernar en coalición con partidos como Podemos, una fuerza que «reniega de la monarquía parlamentaria», «del peso que tiene que tener la Justicia independiente» y de «la labor que hace el parlamentarismo», pero también por apoyarse para su gobernabilidad en otras formaciones como EH Bildu, a los que señala como herederos de Batasuna, o ERC, sobre la que recordó que cuenta en su cúpula con dirigentes «condenados por dar un golpe a la Constitución» y a los que Sánchez concedió el indultó. Hay un «auténtico desafío a la constitucionalidad» por parte del Gobierno, por «mucho que ahora lo intentan ocultar en soflamas», denunció.

Como ya es habitual cada 6 de diciembre, no acudieron al acto los diputados de las formaciones nacionalistas e independentistas, entre los que se encuentran los representantes de varias fuerzas parlamentarias sobre las que Sánchez acaba de apoyarse para aprobar los Presupuestos en el Congreso. Ni EH Bildu, ni ERC, ni el PDECat, ni Junts, ni el PNV, ni Compromís acudieron a la cita. Tampoco el BNG o la CUP. Otra de las ausencias destacadas fue la de Santiago Abascal, que se refirió al evento como «una burla» en la que solo representan «al consenso progre».

Ausencia de Yolanda Díaz

En representación de UP sí estuvieron sus miembros en el Gobierno, con la excepción de Manuel Castells y de Yolanda Díaz, de viaje oficial en Bruselas, desde donde llamó a «ensanchar» los derechos y las libertades recogidos en la Constitución. Ocho presidentes autonómicos acudieron a la cita. Buena parte de las miradas recayeron sobre Ayuso, que volvió a reencontrarse con Pablo Casado cinco días después de la presentación del último libro de Mariano Rajoy. El líder del PP restó importancia a la caída en los sondeos tras el enfrentamiento que mantiene con la presidenta madrileña.

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