El PSOE niega que boicotee las leyes de Podemos

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

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Héctor Gómez.
Héctor Gómez. Fernando Alvarado | EFE

Ambos socios son conscientes de que las costuras se verán sometidas a una mayor presión en cuanto se aproximen las elecciones

29 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

«Niego la mayor. No hay voluntad de ralentizar las leyes de Unidas Podemos». Así de contundente se mostró ayer el portavoz del PSOE en el Congreso, Héctor Gómez, en declaraciones a RNE. El diputado socialista salió al paso así de una crítica surgida en el seno de Unidas Podemos en el que denunciaban un supuesto intento de sus compañeros del Ejecutivo para intentar paralizar, diluir o restar fuerza a las iniciativas gubernamentales impulsadas desde las carteras moradas.

Gómez hizo hincapié en uno de los mensajes que más repetían Sánchez e Iglesias dos años atrás durante los primeros pasos completados por la coalición insistiendo en que las medidas impulsadas desde cualquier ministerio eran responsabilidad y mérito del Ejecutivo al completo. «Este Gobierno está impulsando iniciativas de gran calado», reivindicó ayer el portavoz socialista, afirmando que la interlocución con los responsables del Ejecutivo es «prácticamente diaria».

El PSOE y Podemos establecieron al inicio de la legislatura varios foros para tratar de evitar problemas de entendimiento y para fijar posturas comunes antes de la toma de decisiones. El día a día acabó relegando varias de estas herramientas casi al olvido hasta que a finales de octubre Podemos pulsó el botón rojo para convocar una reunión del gabinete de crisis a raíz de las «injerencias» desde la vicepresidencia económica, es decir, de Nadia Calviño, en la reforma laboral, supuestamente capitaneada por la vicepresidenta segunda y responsable de Trabajo, Yolanda Díaz. Sánchez reunió a sus altos cargos y logró apaciguar los ánimos sobre un proyecto que finalmente fue ayer aprobado en el Consejo de Ministros. Calviño no estaba sobre la mesa en la que se ofreció la rueda de prensa, pero sí sorprendió la inclusión a última hora del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, que intervino en un proyecto en el que su papel fue casi testimonial, un movimiento que en el seno de Unidas Podemos apreciaron de nuevo como un intento de restarle parte de protagonismo a Yolanda Díaz, cuya popularidad continúa en aumento.

Proximidad electoral

Desde los morados no solo aprecian esa táctica de disolver sus acciones, sino que en ciertas ocasiones, como con la ley animal, la ley de vivienda y otras medidas también detectaron un intento de boicot a través de lo que en el argot político se conoce como «meter en el cajón», es decir, de paralizar los proyectos casi hasta que caigan en el olvido.

Lo que ambos socios tienen claro que a medida que se acerquen las elecciones, las costuras se verán sometidas a una mayor presión, aunque confía en que no acabe rompiendo la coalición.