Un año del «brexit» sin beneficios

Juan Alonso LONDRES

ACTUALIDAD

PASCAL ROSSIGNOL

Las bondades que el «brexit» prometía para la economía británica no llegan. La mayoría de los industriales reconocen dificultades añadidas en sus negocios

16 ene 2022 . Actualizado a las 09:37 h.

 Un año ha transcurrido desde que el Reino Unido dejó definitivamente la Unión Europea (UE) y los empresarios aún no han visto los jugosos beneficios y las nuevas oportunidades que los defensores de divorcio prometían que les dejaría la recuperada independencia de Bruselas. Tampoco esperan verlos en el corto plazo. Más bien al contrario, la mayoría de los industriales británicos temen que sus líneas de suministro y sus exportaciones sufran demoras en las aduanas y que sus costes de producción aumenten en los próximos meses.

Los pesimistas pronósticos figuran en una encuesta que MakeUK, una organización que agrupa a 20.000 empresas manufactureras de país, realizó a finales del 2021 y cuyos resultados fueron publicados esta semana.

En el estudio, para el que fueron entrevistados directivos de 228 empresas, dos tercios de los consultados afirmaron que el «brexit» había obstaculizado «moderada o significativamente» su negocio en los últimos doce meses. Por su parte, más de la mitad (56 %) dio por hecho que en cuestión de semanas sufrirán más retrasos en sus líneas de suministro y de distribución, debido a los nuevos controles aduaneros que entraron en vigor el pasado 1 de enero. A partir de ese día las empresas británicas deben declarar en las fronteras todas las mercancías que importen de la UE y además deberán realizar un papeleo adicional para alimentos, bebidas y productos de origen animal, para evitar aranceles y obtener una tasa reducida. Estos trámites no serán gratuitos y generarán costes añadidos, aseguran las patronales.

En octubre pasado, la Cámara Británica de Comercio (BCC) publicó otro sondeo, en el cual el 45 % de los consultados aseguraban que habían tenido problemas para importar o exportar bienes y servicios a la UE. Mientras que la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) reveló que en los primeros diez meses del 2021 el intercambio comercial entre el Reino Unido y los Veintisiete fue 13 % menor al registrado en el 2019.

Todo más caro

Pero los nuevos trámites y el papeleo adicional posbrexit son los únicos motivos que están encareciendo la producción británica. La salida del Reino Unido de la UE también ha dejado al país fuera de los acuerdos en materia de emisiones de dióxido de carbono y, por ello, las industrias del país están pagando 10 % más que sus pares comunitarias por contaminar.

Hoy, los empresarios deben cancelar 75 libras (90 euros) por tonelada de carbono producida, mientras que las empresas de la UE pagan 70 libras (85 euros) por tonelada. La diferencia se debe a que el mercado británico es más pequeño que el de la UE. A lo anterior hay que sumarle también que la factura energética, la cual es mayor en el Reino Unido que al otro lado del Canal de La Mancha. Y, por último, están los problemas para contratar personal, que han obligado a muchas compañías a incrementar salarios hasta un 15 % y ofrecer bonos equivalentes hasta tres salarios en sectores como la distribución y la logística.

El 58 % de los entrevistados creen que la escasez de mano de obra está lejos de resolverse y los datos parecen darle la razón, pues el 2021 cerró con más de un millón de vacantes en el mercado laboral sin cubrirse, según reportó la ONS.

No obstante, sobre estos problemas casi las tres cuartas partes de las empresas entrevistadas por MakeUK dijeron que creían que las condiciones del sector mejorarían, y el 73 % de ellas creía que las oportunidades superaban los riesgos. Asimismo, el 63 % consideró que el Reino Unido es un lugar competitivo para operar, frente al 13 % que opina lo contrario.