Costa Rica gira de nuevo hacia el bipartidismo en unas presidenciales con 25 candidatos

Héctor Estepa BOGOTÁ / E. LA VOZ

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Papeleta con los 25 candidatos a las elecciones presidenciales de este domingo en Costa Rica
Papeleta con los 25 candidatos a las elecciones presidenciales de este domingo en Costa Rica Jeffrey Arguedas

El país, considerado un oasis de estabilidad en la región, trata de superar los daños generados por la pandemia en su economía

05 feb 2022 . Actualizado a las 10:15 h.

Costa Rica acude a las urnas este domingo en un momento difícil, con su modelo de «pura vida» atravesando serios problemas. El país centroamericano ha sido visto durante décadas como un oasis de estabilidad política y social en la región, haciendo gala de un sistema de bienestar fuerte. La pandemia, los escándalos políticos, y una última administración impopular han creado ahora, sin embargo, una incertidumbre en la población que se va a plasmar este domingo en la primera vuelta de las elecciones presidenciales.

Al menos un tercio de los costarricenses —o ticos, como se los conoce en la región— no saben todavía a quién van a votar en una enorme papeleta en la que aparecen las caras de hasta 25 aspirantes a la presidencia.

José María Figueres, el candidato a la presidencia de Costa Rica que lidera los sondeos, este viernes, al llegar a un debate con los otros aspirantes
José María Figueres, el candidato a la presidencia de Costa Rica que lidera los sondeos, este viernes, al llegar a un debate con los otros aspirantes Jeffrey Arguedas

El gran número de indecisos distorsiona los resultados de las encuestas, que lidera el expresidente José María Figueres (1994? 1998), del Partido Liberación Nacional (PLN, centroizquierda) aunque apenas con entre un 15 % y un 20 % de apoyo, muy lejano del 40 % de votos que necesitará el domingo en las urnas para ganar en primera vuelta y evitar el balotaje de abril. Figueres es hijo del estadista José Figueres Ferrer, que abolió el Ejército en 1948, algo que siempre recuerdan los guías turísticos del país.

Le siguen en los sondeos la abogada y exlíder de la policía judicial Lineth Saborío, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC, centroderecha), con alrededor de un 13 % de apoyo en las encuestas, y con cerca de un 10 % de posibles sufragios se sitúa el pastor evangélico Fabricio Alvarado, que ya consiguió pasar a la segunda vuelta en el 2018. 

Dos grandes opciones

El PLN de Figueres y el PUSC de Saborío son los partidos tradicionales de Costa Rica, que se dividieron el poder durante el siglo XX. Los ticos parecen volver a optar por las formaciones históricas ante el descrédito del Gobierno de Carlos Alvarado, del Partido Acción Ciudadana (PAC, centroizquierda), la formación que rompió el bipartidismo en el 2014.

Los últimos años no han sido sencillos en Costa Rica. La pandemia afectó a la línea de flotación del país, los ingresos turísticos, y miles de personas perdieron su trabajo. El 12 % de los costarricenses estaban desempleados antes de la pandemia. La cifra aumentó al 24 % en el 2020 y ahora permanece en el 15 %.

El PIB cayó un 4 % en el 2020, cifra menor que en otros países de la región, pero que supone el mayor descalabro económico para Costa Rica desde 1982.

Ante el descenso de ingresos, Alvarado pidió un préstamo al Fondo Monetario Internacional por valor de 1.700 millones de dólares, acompañado, como es habitual, de medidas de ajuste que el presidente no ha podido llevar a cabo al ser bloqueado en el Parlamento por la oposición.

Como consecuencia de la crisis, y en buena medida por la dejadez de los últimos años, los costarricenses denuncian un empeoramiento de los servicios de salud y educación pública, antaño emblemas del país. 

Tramas de corrupción

Además, han aflorado tramas de corrupción en las que se han visto implicados altos funcionarios, alcaldes, y varias de las más importantes constructoras del país.

El candidato oficialista, Welder Ramos, tiene apenas un 1 % de intención de voto y casi nulas posibilidades de pasar a la segunda vuelta en un país más revuelto de lo habitual.