El Reino Unido congela los fondos que tres bancos rusos tienen en el país

Juan F. Alonso Londres LONDRES / E. LA VOZ

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La ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss, en la Cámara de los Comunes
La ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss, en la Cámara de los Comunes

«Vamos a golpear su economía y cortaremos los fondos para la maquinaria de guerra de Putin», anunció la ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss

01 mar 2022 . Actualizado a las 10:21 h.

El Reino Unido quiere secar las arcas públicas rusas, para así forzar al Kremlin a poner fin a su invasión a Ucrania. Y para lograr este objetivo el Gobierno de Boris Johnson anunció este lunes una batería de nuevas sanciones económicas contra Moscú, entre las que destaca la congelación de todos los fondos que los tres principales bancos de ese país tienen en Londres.

«Vamos a golpear la economía rusa y cortaremos los fondos para la maquinaria de guerra de Putin», anunció la ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss, en la Cámara de los Comunes. Los afectados son El Banco de Desarrollo Ruso VEB, Sovcombank y Otkritiye.

Además, presentó una ley que busca cerrar la puerta del mercado británico a las instituciones financieras rusas. «El 50 % del comercio ruso se hace en dólares o en libras. Con acciones coordinadas con EE.UU. dañaremos ese comercio», aseguró. Truss recalcó que tan pronto la nueva ley sea aprobada, será aplicada a Sberbank, el principal banco ruso. Se estima que tiene activos en Europa por 13.000 millones de euros.

También por el mar

El ministro de Comercio, Kwasi Kwarteng, ofreció detalles de la nueva Ley de Delitos Económicos. Esta dará poderes al registro mercantil inglés y galés para solicitar información a los potenciales inversores que deseen abrir una empresa. Estos tendrán que dar detalles sobre sus identidades y posesiones cuando los organismos lo consideren necesario. «Nadie podrá crear empresas en el Reino Unido en nombre de delincuentes extranjeros u oligarcas».

Por su parte, el ministro de Transportes, Grant Shapps, dio instrucciones a los puertos británicos para que no reciban embarcaciones rusas de ninguna naturaleza. La medida afectará a dos cargueros de petróleo, que tenían previsto descargar próximamente en puertos ingleses y galeses.

Las autoridades también recularon una eventual participación de británicos en la Legión de combatientes extranjeros de Kiev. El ministro de la Defensa, Ben Wallace, pidió abstenerse, contradiciendo a la jefa de la diplomacia, que valoró en positivo la iniciativa.