Los empleados de Amazon en EE.UU. ganan el pulso a la empresa y crean su primer sindicato

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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BRENDAN MCDERMID | Reuters

El gigante del comercio electrónico invirtió mucho esfuerzo y dinero en evitar que sus trabajadores se unan

03 abr 2022 . Actualizado a las 09:57 h.

Los trabajadores de un almacén de Amazon en Staten Island (en Nueva York) han conseguido hacer historia. Porque este grupo de empleados formará el primer sindicato del gigante del comercio tecnológico. No ha sido fácil. Porque la compañía creada por Jeff Bezos ha intentado por todos los medios frustrar cualquier iniciativa de organización sindical.

«Hemos trabajado, nos hemos divertido y hemos hecho historia. Doy la bienvenida al primer sindicato de Amazon en Estados Unidos», escribía el líder sindical Christian Smalls en su cuenta de Twitter para, unos minutos después, celebrar el hito descorchando una botella de champán junto al resto de sus compañeros de las instalaciones, donde trabajan unas 6.000 personas.

En la votación que emprendieron, 2.654 empleados se manifestaron a favor de organizarse en un sindicato, frente a los 2.131 que votaron en contra. Ahora, estos resultados tendrán que ser confirmados por la Junta Nacional de Relaciones Laborales: «Es oficial, el Sindicato Laboral de Amazon (ALU, según sus siglas en inglés) es el primer sindicato de Amazon en la historia de EE. UU. ¡El poder para el pueblo!», escribía el sindicato en su página oficial.

Amazon es la segunda mayor empleadora de Estados Unidos, solo por detrás de la cadena de supermercados Walmart, y desde el inicio de la pandemia ha disparado tanto su actividad como sus beneficios y ha contratado a decenas de miles de nuevos trabajadores.

Frustrar cualquier intento

El gigante del comercio electrónico ha invertido gran esfuerzo y dinero en evitar que sus trabajadores se unan con una sola voz para negociar un convenio colectivo, que será el siguiente paso, una vez que se conforme oficialmente el sindicato. Durante años, sus directivos habían logrado frustrar cualquier intento mediante presiones, acoso y campañas informativas contra el movimiento obrero. Estas últimas semanas, habían llegado a empapelar las instalaciones de Staten Island con carteles en los que se podía leer «Vota No» e incluso Amazon llegó a crear una página web con el mismo fin.