PSOE y Unidas Podemos intentan alejar el fantasma del fin de la legislatura

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

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Yolanda Díaz advierte que Feijoo está «ansioso» por conquistar la Moncloa

06 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Pedro Sánchez insiste en que agotará la legislatura. Cada vez que tiene la ocasión, el presidente del Gobierno afirma que no adelantará los comicios, y que por tanto los españoles serán llamados a votar en diciembre del 2023. Pero en la oposición no se fían de la palabra del presidente. El líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, lo evidenció este miércoles: «El señor Sánchez hará lo que más le convenga. Tengo pocas dudas. Ha hecho en cada momento lo que más le convenía», advirtió. En Génova suelen recurrir a tres cuestiones para poner en evidencia la falta de credibilidad del presidente: su promesa en la recta final de campaña de no pactar con Podemos, los indultos que concedió a los secesionistas catalanes y sus pactos con EH Bildu, formación que Sánchez advirtió como una línea roja pero que en esta legislatura se viene demostrando como uno de los aliados parlamentarios fundamentales del Gobierno.

El presidente del PP se cuidó de hacer ningún pronóstico sobre la fecha de las próximas elecciones, pero puso de relieve que ante la situación de «caos» que se vive en el Gobierno y su debilidad parlamentaria, «lo lógico en un país europeo sería pensar si se puede seguir así», y que por tanto Sánchez pudiera estar pensando en un adelanto. Estas palabras fueron interpretadas en determinados ambientes como un reclamo del dirigente gallego para que se disolviesen las Cortes.

En el Gobierno no niegan que la coalición atraviesa por uno de sus momentos más delicados de la legislatura, pero insisten en que conseguirán llegar a la meta.

La vicepresidenta primera, la socialista Nadia Calviño, mostró ayer en RNE su «sorpresa» con las palabras de Feijoo, invitando a todos los actores políticos «a remar en la misma dirección». El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, calificó esta supuesta petición como «un clásico» de la derecha. «Feijoo lo que tiene es que pedir perdón por votar no a la reforma laboral y pedir perdón porque quiso subir el litro de gasolina y la factura de la luz», dijo, sobre algunas de las últimas votaciones de los populares en el Congreso, pese a que la primera de ellas todavía estaba Casado al frente del partido.

UP reclama acercarse a ERC

Aunque la decisión de adelantar o no las generales corresponde en exclusiva al presidente del Gobierno, dentro de la familia de Unidas Podemos también mostraron su confianza en agotar la legislatura. Fuentes dentro del partido insisten en que son los «primeros interesados» en ello, pero advierten sobre la necesidad de reconstruir las relaciones con ERC, formación que tiene la llave de las mayorías y que en los últimos días viene sembrando dudas de que Sánchez pueda llegar al final. Para evitar más disgustos con las votaciones, Jaume Asens, líder del grupo parlamentario de UP, invitó a Sánchez a reunirse con el presidente catalán, Pere Aragonès. En este mismo sentido, Isa Serra, portavoz de Podemos, consideró en Radio Euskadi que la legislatura «no está en riesgo», aunque instó a sus socios de coalición a «cuidar a la mayoría de la investidura».

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno, manifestó en Telecinco que el líder del PP está «ansioso», por lo que le recomendó «calma» y un «poquito de compromiso» con su país. Sobre este asunto opinó también Unai Sordo, secretario general de CC. OO., que auguró que no habrá «ruptura de la coalición», ya que precipitar un adelanto electoral sería «una irresponsabilidad mayúscula».

Por su parte, Néstor Rego, diputado del BNG, no quiso «entrar» en si habrá o no adelanto, pero también denunció la «mucha prisa» que tiene Feijoo.

Arrimadas quiere un adelanto

Finalmente, la que sí reclamó un adelanto con claridad fue la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas: «Todo lo que sea poder cambiar el Gobierno nos parece una buena noticia», afirmó. Desde su punto de vista, el Ejecutivo no llegó a disfrutar «nunca» de estabilidad: «Siempre ha sido un castillo de barro», dijo.

Pegasus quiebra la relación del Gobierno con ERC, enfrenta a la coalición y abre una crisis en el PSOE

Bolaños y Robles, en una imagen de archivo.
Bolaños y Robles, en una imagen de archivo. ZIPI ARAGON | EFE

Pegasus no solo ha deteriorado las relaciones entre el Gobierno y ERC y ha provocado una nueva crisis entre los dos socios que integran la coalición, con Unidas Podemos pidiendo la dimisión «por dignidad» de Margarita Robles; el intento por sofocar el incendio generado por el supuesto espionaje a independentistas también ha abierto una brecha interna en la parte socialista que forma parte del Ejecutivo. La ministra de Defensa, Margarita Robles, invitó este miércoles a bucear por la legislación española para determinar a quién corresponde la seguridad del teléfono móvil del presidente del Gobierno, uno de los terminales contagiados, y por tanto, apuntando directamente hacia el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. Esta salida de Robles fue interpretada como un contragolpe ante la falta de respaldo que pudo sentir la ministra por parte de sus compañeros ante los ataques de los independentistas y de Podemos. Según publicó El País, la crisis abierta entre la Moncloa y la titular de Defensa motivó que Bolaños y Robles mantuvieran una llamada telefónica con el objetivo de aclarar las cosas.

El hombre fuerte de Sánchez en el Ejecutivo trasladó ayer en público su «afecto, apoyo y solidaridad» a la ministra de Defensa, y dio un paso para intentar sellar esta nueva brecha interna abierta en el Ejecutivo.

Preguntado sobre si se siente señalado por Robles por su posible responsabilidad cuando era secretario general de la Presidencia, su cargo cuando el teléfono de Sánchez fue intervenido, Bolaños señaló que «la responsabilidad es del Gobierno en su conjunto en que las instituciones democráticas funcionen con todas las garantías y que los españoles tengan claro que el derecho a la privacidad y que el secreto a las comunicaciones se garantizan».

«El Gobierno en su conjunto trabaja cada día para esclarecer los hechos de los que tuvimos conocimiento durante el fin de semana», afirmó, por lo que tomarán «medidas para que no se repita».

Marlaska, sin comentarios

Otra de las disputas internas está en la relación entre Robles y el responsable del Interior, Grande-Marlaska. Según indicaron fuentes de este departamento a Efe, el ministro se enteró por la prensa del rastreo efectuado por el CNI a su terminal, en el que se hallaron huellas de Pegasus. «No tengo conocimiento, no voy a hacer ningún comentario», manifestó ayer al ser preguntado por la prensa durante una visita oficial a Valladolid para participar en una conferencia.

Feijoo denuncia que la gestión del caso y la división que propició son «alarmantes»

Alberto Núñez Feijoo se mostró crítico con la gestión del Gobierno sobre el espionaje y con las divisiones abiertas en su seno. El líder del PP calificó de «alarmante» el «grado de inseguridad y la falta de fiabilidad» del Ejecutivo en un asunto «tan complicado». Con el mismo adjetivo se refirió al «grado de división» existente en el Gobierno. Esa fractura, señaló, afecta a los ministros socialistas entre ellos, a los ministros de Podemos con los del PSOE y a los aliados parlamentarios del Gobierno.

Acusan a Rufián de revelar secretos tras la reunión con la directora del CNI

El diputado de ERC en el Congreso Gabriel Rufián comentó parte del contenido de la reunión de la comisión de secretos sobre las escuchas por el caso Pegasus, después de que el catalán publicara en Twitter pinceladas de lo que se habló. Rufián dijo que «organismos descontrolados» u otro país están tras las escuchas ilegales. Y la reacción no se hizo esperar, pues tanto Ciudadanos como Vox anunciaron que llevarán a Rufián ante la Justicia por revelación de secretos.